Y lo hará a tiempo para cobrar su primer dividendo por su participación en la operadora de telecomunicaciones, cuyo pago está previsto para el próximo 20 de junio. Y si, como todo apunta que ocurrirá, la Sepi es titular ya de ese 10%, el Estado percibirá 85 millones de euros como primer accionista de la compañía. 

El Consejo de Ministros del pasado 19 de diciembre de 2023 ordenó a la sociedad estatal que llevara a cabo la compra de hasta un 10% del capital social Telefónica. Y que lo hiciera de una forma que minimizara el impacto de la operación en la cotización en bolsa de la compañía española de telecomunicaciones.

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Con esta máxima, hubo que esperar hasta el 25 de marzo para tener nuevas noticias oficiales sobre el regreso del Estado a Telefónica 27 años después de su privatización. Ese día, la Sepi afloró un 3,044%, tras superar el primer umbral (3%) en el que un accionista de una empresa cotizada está obligado a comunicar su participación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Desde entonces, la Sepi ha ido incrementado su peso en Telefónica de forma constante. El 15 de abril informó al regulador de que había superado el 5% y diez días después (25 de abril) comunicó a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC por sus siglas en inglés) que ya era titular del 6,169% de las acciones del grupo presidido por José María Álvarez-Pallete. 

La sede de la SEPI.

La confirmación de que había superado el umbral del 7% llegó el 8 de mayo, cuando informó de que poseía ya el 7,079% y solicitó que Carlos Ocaña fuera su representante en el consejo de administración de la compañía. Y esta misma semana la Sepi comunicó el martes el 14 de mayo que había superado el 8% y tan sólo dos días después, el 16 de mayo, que estaba ya por encima del 9%. 

A este ritmo, y si nada frena el ritmo de compras, todo apunta a que en unas semanas tendrá ya el 10%. Aunque no hay que olvidar que ese 10% es un objetivo máximo, por lo que es posible que nunca llegue a ese umbral, nada hace pensar que, visto cómo ha evolucionado el proceso, el Gobierno vaya a renunciar a él.

Dividendo

Con esta evolución, es previsible que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales llegue al próximo pago del dividendo, previsto para el 20 de junio, habiendo alcanzado una participación del 10%. Es decir, será titular de alrededor de 567 millones de acciones de Telefónica. 

Teniendo que el importe de este primer pago del dividendo para el año 2024 asciende a 0,15 euros, la Sepi percibiría alrededor de 85 millones de euros brutos. Una cantidad que volverá a recibir en el mes de diciembre, en concreto el día 19, cuando se abone el segundo tramo de los 0,30 euros prometidos para este año.

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Según informó Telefónica a la CNMV después de la junta general de accionistas celebrada el pasado 12, la última fecha de contratación en la que las acciones
se negociarán con derecho a recibir el primer tramo del dividendo será el 17 de junio de 2024. Para el segundo tramo del dividendo, esa última fecha de contración será el 16 de diciembre. 

En esa misma junta también se aprobó precisamente la reducción de capital mediante la amortización de acciones propias de Telefónica, otra forma que la compañía tiene de remunerar a sus accionistas. En concreto, el consejo acordó reducir el capital en 80.296.591 euros, mediante la amortización de 80.296.591 títulos en autocartera.

El consejo de administración de Telefónica durante la celebración de la junta general de acciones de la compañía de 2024. Telefónica

Telefónica ya se ha beneficiado de esta medida, tal y como explica en su comunicado de esta semana a la SEC. En concreto, la reducción de capital ha permitido que con las mismas acciones que tenía en la operadora, la Sepi haya elevado visto incrementarse el peso de su participación desde el 8,419 al 8,538% del capital social. 

El mismo efecto tendrá en los porcentajes que ostentan actualmente el resto de accionistas, como BBVA, Blackrock, CriteriaCaixa o Stc. De hecho, la participación que posee el grupo saudí de telecomunicaciones en acciones con derecho a voto pasará automáticamente del 4,9% actual al 4,969%.

De esta manera, Stc seguirá estando por debajo del umbral del 5%, que es a partir del cual una empresa extranjera que invierte en una compañía con intereses en el ámbito de la defensa nacional, como es el caso Telefónica, debe solicitar autorización al Gobierno español. 

No obstante, si convirtiera los más de 287,5 millones de acciones que posee a través de instrumentos financieros en títulos con derecho a voto su participación superaría el 9,9% anunciado en septiembre cuando entró en el capital de Telefónica tras invertir 2.100 millones de euros. En concreto, se elevaría al 10,04%.