El director de una de las compañías de ballet más prestigiosas de Alemania ha sido despedido por restregar con excrementos de perro el rostro de una periodista que escribió un artículo crítico. La dirección de la Ópera Estatal de Hannover ha anunciado este jueves la rescisión del contrato por acuerdo de ambas partes con el coreógrafo y responsable del ballet de la entidad, Marco Goecke.

"Las acciones irresponsables de Marco Goecke han molestado profundamente a la audiencia, irritado al público, violado todos los principios de la casa y dañado enormemente la reputación de la Ópera Estatal de Hanóver", ha señalado la institución en un comunicado. "Su comportamiento nos molestó", ha añadido Laura Berman, directora del coliseo alemán, quien también afirmó que el renombrado coreógrafo había protagonizado un ataque "asqueroso y repugnante".

La dirección de la ópera ya había suspendido provisionalmente Goecke por su respuesta al texto de Wiebke Huester, una crítica de danza del periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung que el pasado sábado asistió al estreno del ballet Glaube–Liebe–Hoffnung (Fe-Amor-Esperanza). Según relataron los medios alemanes, el responsable se encaró con la periodista en el intermedio de la representación para recriminarle varias reseñas negativas en su contra. A continuación, abrió una bolsa que contenía excrementos de su perro y se los restregó por la cara. 

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Laura Berman, la directora de la Ópera de Hanóver, y Falko Mohrs, el ministro de Cultura del "Land" de Baja Sajonia, han comparecido ante la prensa este jueves para explicar la decisión tomada. El miembro del Gobierno alemán ha asegurado que el comportamiento del coreógrafo fue "inaceptable" y que al rescindir el contrato el teatro adoptaba una "decisión consecuente".

El director de ballet está siendo investigado por la policía por un presunto delito de lesiones e insultos. Goecke, aunque reconoció que el medio de protesta no fue el "ideal", defendió su actitud en una entrevista televisiva afirmando que la crítica cultural también le había "tirado mierda" durante años. "Cuando uno es una figura pública y durante años ve su obra manchada por una periodista, se dice que es el precio por estar en la vida pública. Pero, a partir de cierto punto, soy de otra opinión", afirmó.

La versión que ha dado Wiebke Huester, la víctima, es que tras una breve confrontación verbal en la que Goecke la acusó de ser responsable de la reducción en el número de abonados al teatro, el coreógrafo abrió una bolsita con excrementos de perro y procedió a untársela en la cara para después darse a la fuga.

La Ópera de Hanóver ha declarado sentirse "horrorizada" ante el incidente, en el que la periodista, con la que el Teatro ya se ha disculpado, fue "herida en su integridad personal en un modo inenarrable". El director de ballet, de 50 años, ha obtenido numerosos galardones, entre ellos el de Premio de la Danza Alemán de 2022 y sus obras se han representado en escenarios de todo el mundo.