En España, existe una gran "cultura del motor" y por eso, nos importa mucho saber cómo cuidar y limpiar nuestro coche. Ahora que ya sabemos cómo limpiar la tapicería del coche, te contamos cómo limpiar el radiador. Se trata de una pieza fundamental del coche que favorece su buen funcionamiento. De hecho, sin él la refrigeración del motor no podría llevarse a cabo, y es algo tan vital que el vehículo acabaría estropeándose de manera irremediable. De ahí la importancia de no circular con el radiador del coche sucio. Por ello, te mostramos mo limpiar y mantener el radiador del coche en perfecto estado. ¡Comenzamos!

Cómo limpiar el radiador del coche sucio por fuera

Con el tiempo, el radiador del coche va perdiendo capacidad de refrigeración por la suciedad acumulada, tanto por dentro como por fuera. La del interior imposibilita que el calor se propague de manera adecuada desde el anticongelante hasta el radiador, dificultando la circulación de este líquido. Por su parte, la suciedad externa impide que el aire acceda al radiador para disminuir la temperatura.

Una limpieza interna del radiador del coche sucio debe hacerse de forma periódica. En especial, si solemos circular por zonas con mucho polvo, insectos o barro. Por ello, es conveniente darle con la manguera del agua a presión cuando laves tu vehículo.

Hazlo primero con el programa de enjabonar y aclara después junto al resto del coche. Lo que no deberías hacer nunca es hacerlo con el programa para abrillantar, de cera caliente u otro similar, ya que suelen dejar restos.

No obstante, si quieres hacerlo de una forma más meticulosa, tendrás que desmontar el parachoques delantero y dejar el radiador al descubierto. A continuación, utiliza un cepillo con agua y jabón para poder frotar bien y eliminar toda la suciedad incrustada. No utilices nada de metal, y ten mucho cuidado para no deteriorar las placas de aluminio. Por último, enjuágalo con abundante agua a presión.

Trucos caseros para limpiar el radiador del coche por dentro

1. Producto específico (opcional)

Puedes utilizar uno de los muchos productos específicos para limpiar y mantener el radiador del coche por dentro en perfecto estado. Suelen ponerse dentro del sistema de refrigeración, el motor se calienta para que se abra el termostato y el anticongelante pueda fluir por todo el sistema. Esto es opcional, y debes seguir las instrucciones del envase.

2. Motor frío

Para limpiar el radiador del coche sucio debes hacerlo con el motor frío. En caso contrario, la temperatura y altas presiones dentro del circuito podrían hacer que salpique líquido cuando destapes su entrada.

3. Vaciado del circuito

Para vaciar el radiador y todo el sistema de refrigeración, debes acceder por la parte baja del coche. Allí habrá una especie de llave o tapón que permite el vaciado del anticongelante, y si no lo hay, tendrás que retirar el manguito de la parte más baja del radiador. Si quitas otro, no se vaciará entero.

4. Reciclado

El líquido refrigerante es bastante tóxico, a no ser que sea orgánico. Así que te recomendamos que lo almacenes en un recipiente al cambiarlo y te deshagas de él en un centro de reciclaje evitando el contacto con niños o animales.

5. Enjuague

Cuando el radiador esté vacío por completo, coloca una manguera en la apertura del radiador y deja fluir el agua a presión sin que salpique, pues las consecuencias podrían ser desastrosas. El manguito, llave o tapón inferior debe estar abierto para que salga el agua por él, y no pares hasta que el agua salga cristalina. Si está caliente, el resultado será mucho mejor.

6. Agua destilada

Una vez que el radiador esté limpio, rellena el circuito con agua destilada, ciérralo y enciende el motor para calentarlo. Enciende también la calefacción al máximo con el ventilador al mínimo para que se abra también el circuito secundario.

Después, espera hasta que se enfríe un poco para evitar salpicaduras cuando abras el vaso de expansión. Vuelve a abrir el manguito, tapón o llave de la parte baja del radiador para que salga el agua destilada y el radiador quedará impecable.

7. Anticongelante nuevo

Cierra el manguito, tapón o llave del radiador y rellénalo con líquido refrigerante poco a poco. También puedes utilizar otra vez agua destilada en su lugar, aunque los fabricantes desaconsejan esta alternativa rotundamente.

De hecho, si usas agua destilada en lugares donde la temperatura suele bajar de 0 ºC, dañarás el motor seriamente. Además, el precio del anticongelante es muy asequible, por lo que no merece la pena correr este riesgo por ahorrarte unos euros.

No mezcles nunca distintos tipos de anticongelante, y si en tu coche se especifica que debe usarse un tipo en concreto, no utilices otro. Fíjate bien, suele venir indicado de forma visible en el vaso de expansión.

8. Purgado del anticongelante

Como el circuito de refrigeración gira y pasa por otros componentes más complejos, siempre puede quedar algo de aire. Por ello, conviene abrir el tapón del vaso y poner el coche en funcionamiento hasta la temperatura de servicio para abrir el termostato. De este modo, el motor moverá el líquido y expulsará el aire a través del vaso expansor, pudiendo añadir anticongelante hasta el nivel indicado.

9. Cambio de tapón (opcional)

Terminamos estos trucos caseros para limpiar el radiador del coche cambiando el tapón del radiador. Por lo general no es necesario sustituirlo, ya que si el coche es relativamente moderno ajustará bien al colocarlo de nuevo.

Sin embargo, el paso del tiempo y los cambios de temperatura constantes pueden llegar a agrietarlo o deformarlo. Ahora que sabes cómo limpiar y mantener el radiador del coche, y las consecuencias de circular con el radiador del coche sucio, sigue estos trucos caseros para limpiar el radiador del coche y alargarás de forma considerable su vida útil.

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