Vivir en una vida loca. Cargada de estrés, de tareas, de ruido. Pero vivir. Hay personas, como Francisco López, enfermero del Bloque Quirúrgico y Miembro del Comité de Innovación e Investigación del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, que además de vivir, dan vida gracias a su apuesta firme por ayudar y contribuir con todos sus conocimientos en hacer una sociedad mejor y con menos sufrimiento.

Este vallisoletano, que acumula 13 años de trabajo brillante en el centro hospitalario pucelano triunfó el pasado sábado, 20 de noviembre, en el VI Hackaton Salud, donde su proyecto fue elegido como la mejor App digital para el control del dolor oncológico.

Un evento que se desarrolló de forma online y en la que participaron más de 100 hackers que buscaban crear soluciones de salud digital. Los 27 equipos participantes optaron a 11.000 euros en premios tras resolver alguno de los ocho retos propuestos por la organización. Siete horas de competición en las que los equipos contaron con el apoyo de mentores del ámbito sanitario, tech y de emprendimiento y que se saldaron con el triunfo de la brillante idea de este vallisoletano.

AliviApp, una aplicación para reducir el dolor de los pacientes oncológicos

“El proyecto surge mientras hablaba con un compañero de la universidad, con José María Cepeda, que es un líder en Salud Digital. Le hablé de varias ideas en las que estaba trabajando, entre ellas la aplicación AliviApp, y me animó e invitó a participar en el evento”, nos cuenta, en declaraciones a EL ESPAÑOL – Noticias de Castilla y León, Francisco López.

La App tiene tres funciones principales. La primera de ellas: el control del dolor. “En AliviApp queremos detectar los factores que influyen en el dolor del paciente oncológico, evaluando tanto el dolor físico, psicológico, espiritual y social”, añade el sanitario. Tras utilizar el paciente dicha aplicación, los profesionales podrán evaluar los factores y determinar en cada paciente el nivel de dolor para protocolizar el tratamiento de forma individualizada.

La segunda de las funciones es la interrelación entre los pacientes. “Entendemos que los que tienen patologías similares o se encuentran en estadios comunes de su enfermedad pueden comunicarse entre sí a través de grupos o videochats en los que los enfermos oncológicos con mayor experiencia pueden aconsejar a los que comienzan el tratamiento, tanto en la aceptación como en el manejo de las fases de su patología”, añade nuestro entrevistado. Ambos pacientes se sienten así útiles, perciben que no están solos y fomentan esa conciencia de grupo.

Por último, la App quiere convertirse en un espacio multidisciplinar en el que se “integre a todos los profesionales que participan en el largo proceso del paciente oncológico” como son las enfermeras, los médicos, los fisioterapeutas, los oncólogos y los farmacéuticos para “contribuir con sus últimos estudios, tratamientos o infografías y vídeos para formar a estudiantes”, nos explica Francisco.

Actualmente están en contacto continuo con la empresa 360medics que se encuentra monitorizando el desarrollo de la aplicación y está ofreciendo su software para dar cabida a la aplicación. El enfermero del Río Hortega asegura que “todavía queda un largo trabajo de diseño e investigación” hasta que “pueda estar disponible la descarga” aunque “alguna de las secciones” como la del espacio multidisciplinar “será la que más rápido vea la luz”.

Puesta de largo en un marco incomparable

“No esperaba ganar aunque tenía experiencia en innovación o en diseño de páginas web pero no había trabajado nunca con aplicaciones. La estructura de AliviaApp creo que gustó porque es capaz de evaluar al paciente de una forma integral”, añade el especialista.

Consiguió triunfar el pasado 20 de noviembre en el VI Hackathon Salud, un evento que surge de los términos hacker y maratón en el que se reunieron más de 100 programadores y expertos en inteligencia artificial y profesionales sanitarios. Tras más de diez horas diseñando aplicaciones, al final de la jornada, se hizo público el fallo del jurado en un evento que se desarrolló online por culpa del coronavirus y que coronó a su app como la mejor para el control del dolor de los pacientes con cáncer.

“Fue una jornada muy enriquecedora ya que pudimos reunirnos con diferentes especialistas, tanto en el campo tecnológico, como sanitario, y nos ayudaban a los que estábamos participando en la gestión del trabajo. Expusimos nuestro proyecto tras más de siete horas de contactos y mejoras de la aplicación y fue evaluado por un jurado formado por 30 expertos de diferentes universidades a los que les encantó nuestra aplicación”, explica el enfermero.

En lucha contra el coronavirus en plena sexta ola

Francisco trabaja en el bloque quirúrgico del Hospital Río Hortega de Valladolid, lo que compete todas las funciones de enfermería antes de la intervención, durante el acto quirúrgico y el control del postoperatorio inmediato en la Unidad de Recuperación post anestésica pero no está ajeno a la sexta ola y a un centro hospitalario que poco a poco va llenando sus camas de pacientes COVID-19.

“La palabra cansancio puede ser la que mejor defina la situación que se vive en el hospital. Creo que cada persona lo vive de una forma diferente. A nivel físico, el cuidado del paciente COVID con un EPI es muy duro. Pero sin duda la carga psicológica es la que, sin duda, más daño va a hacer. Hay profesionales que llevan desde marzo de 2020 sin dejar de cuidar pacientes con esta patología”, explica nuestro protagonista hablando de la situación que se vive por esta nueva ola de coronavirus.

En cuanto al futuro, a nivel profesional, Francisco López busca “implementar las innovaciones que tiene en proceso” y desea que “a los profesionales sanitarios se les reconozca el tiempo trabajado en innovación e investigación”.

Está claro que eso debe ser así. Para muestra, un botón. Y el caso de este enfermero que se desvive por los demás.