El selectivo español se contagiaba de las pérdidas en las bolsas europeas y en Estados Unidos, donde caían con fuerza las tecnológicas ante el temor de que las valoraciones de sus componentes estén exageradas.

Pese a que la subida de tipos de interés de la Fed el miércoles se esperaba, una serie de indicadores económicos flojos hacían dudar de si la economía de Estados Unidos es lo bastante sólida para soportar un endurecimiento mayor de la política monetaria.

A esa preocupación sobre el repunte de la principal economía mundial se sumó el jueves una amplia caída de la producción fabril por encima de lo esperado.

El nerviosismo del mercado se veía agravado por una información de The Washington Post que señalaba que el presidente Donald Trump está siendo investigado por posible obstrucción a la Justicia.

El Ibex-35 perdió un 0,7 por ciento, a 10.699,60 puntos, por debajo de los niveles de las últimas semanas, mientras el índice europeo FTSEurofirst 300 se dejó un 0,26 por ciento.

El valor más castigado del selectivo fue Mapfre, que cayó un 2,9 por ciento, seguido de cerca por los valores ligados a las materias primas, con descensos del 2,7 por ciento y del 2,4 por ciento, respectivamente, para Arcelor y Acerinox.

Los pesos pesados del selectivo contribuían a estas caídas, dejándose Telefónica, uno de los más penalizados de la jornada, más de un 2 por ciento, lo mismo que Repsol en un contexto bajista del precio del petróleo.

El holding de aerolíneas IAG cayó un 2,4 por ciento el día de su junta de accionistas, en el que su consejero delegado cifró en 80 millones de libras el coste del reciente fallo informático que obligó a British Airways a cancelar múltiples vuelos en Londres el mes pasado.

En un sector bancario que conoció hoy que Unicaja ha decidido salir adelante con la salida a bolsa a entre 1,1 y 1,4 euros/acción, los dos grandes bancos, Santander y BBVA, retrocedieron un 0,7 y un 0,1 por ciento, respectivamente.

En terreno positivo cerraron, Bankinter, Bankia y Caixabank, que se revalorizó un 1,1 por ciento. La italiana Atlantia envíó a la CNMV tras el cierre su oferta por Abertis, en cuyo capital participa Criteria, matriz del banco catalán.

Inditex, que la víspera se vio castigada por una ralentización de las ventas en el inicio del segundo trimestre, cayó un 0,7 por ciento, influido el valor por unas cifras de ingresos inferiores a lo previsto de su competidora sueca H&M en mayo y por el recorte en la recomendación de los analistas de Berenberg.

Fuera del selectivo, el grupo de infraestructuras OHL se disparó un 10,4 por ciento, tras recibir luz verde para lanzar junto con su socio IFM Global Infrastructure Fund una opa sobre su filial mexicana, lo que podría permitir al grupo español seguir reduciendo su deuda.

Los títulos de Pescanova continuaban en una montaña rusa, cerrando con un avance del 45 por ciento, tras movimientos vertiginosos desde que volviera a cotizar la semana pasada tras años fuera del parqué que llevaron a la CNMV a lanzar una advertencia sobre el valor.