El mercado de bonos públicos está intervenido desde hace un par de años con las compras masivas del Banco Central Europeo (BCE) que se materializan a través de los distintos bancos centrales. Así, el Banco de España ostenta el 12,9% (cerca de 130.000 millones de euros), lo que en términos de PIB supone el 12,8%. Presencia pública en la deuda que no suele ser cuestionada por los economistas más liberales del país.

Según el informe del Banco de España, el programa de compras de valores de las Administraciones Públicas del Banco Central Europeo (BCE), en funcionamiento desde el 9 de marzo de 2015 ha afectado de forma significativa a la estructura de tenedores de la deuda de las Administraciones Pública.

Entre 2015 y 2016, el Eurosistema ha adquirido deuda pública ¿indica el informe- de los países del área del euro por valor del 4,7 % y del 7,2 % de su PIB en los años 2015 y 2016, respectivamente. Esto supone en euros contantes y sonantes 495.000 millones y 778.000 millones de euros.

El informe también habla de la estructura de la deuda de las Administraciones Públicas que en 2016 ¿ se concentró en instrumentos de largo plazo (91,3 % del total), con una vida media ligeramente superior a los seis años, y se materializó principalmente en valores (83,1 % del total) que aumentaron su peso en detrimento de los préstamos¿.

Y añade el estudio:¿el período medio de amortización de los activos de deuda pública adquiridos dentro del programa (BCE) fue superior a los ocho años, mientras que el de los títulos de deuda pública española adquiridos se situó por encima de los nueve años. Desde una perspectiva comparada, en 2016 la deuda a corto plazo siguió perdiendo peso con respecto al total de deuda en los principales países del área del euro.

Por último, con este mercado sesgado por las compras del BCE, también se aborda en el estudio la presencia de residentes y no residentes (extranjeros) en la deuda. Así, indica que "el peso de las tenencias de deuda por parte de no residentes aumentó ligeramente con respecto al año anterior, consolidándose el cambio de tendencia iniciado en 2012. El porcentaje de la deuda total en manos de residentes aumentó ligeramente en el área del euro (hasta el 53,5 %), aunque con variaciones dispares por países, destacando España por su perfil descendente de los últimos años.