E.on informó hoy de que la facturación se redujo entre enero y junio un 3 %, hasta 19.583 millones de euros, tras la desconsolidación de Uniper, que agrupa la generación convencional de electricidad.

El año pasado las depreciaciones en Uniper crearon una pérdida neta récord de 16.000 millones de euros.

E.on no pudo traspasar a los clientes hasta mayo el fuerte aumento de las tarifas de conexión a la red de los operadores del sistema de transmisión en Alemania.

El beneficio operativo mejoró en el primer semestre un 85,5 %, hasta 4.334 millones de euros, en comparación con el año anterior.

El presidente de E.on, Johannes Teyssen, dijo que en el primer semestre fortalecieron su balance y redujeron la deuda "más rápidamente de lo previsto".

Desde que se desprendió de la energía convencional, E.on se centra ahora en las redes, las soluciones para los clientes y las renovables.

E.on redujo la deuda neta a finales de junio hasta 21.485 millones de euros, un 18 % menos que a finales de diciembre.

Los principales factores de esta reducción fueron una ampliación de capital de 1.350 millones de euros y la devolución del impuesto sobre la energía nuclear.

Quiere incrementar la cuota de reparto de dividendo a partir del año fiscal 2018 hasta, al menos, el 65 % del beneficio neto antes de extraordinarios, desde el 50 y hasta 60 % actual.

De este modo, añade, se asemeja al reparto de dividendos de otras compañías del sector energético.

Por el año 2017 quiere repartir un dividendo de 0,30 euros por acción.

Las ventas en redes subieron en el primer semestre un 4 % por el aumento en Suecia, Europa Central y Turquía pero en las soluciones a clientes bajaron un 7 % por la caída en el Reino Unido y efectos negativos del tipo de cambio, asimismo expiraron contratos mayoristas en Alemania que se transfirieron a Uniper a finales de 2015.

La división de renovables mejoró las ventas un 4 % hasta junio por la mejora en EEUU con la contribución del parque eólico Colbeck's Corner (Texas).

E.on confirmó que prevé para el 2017 un beneficio operativo antes de extraordinarios de entre 2.800 y 3.100 millones de euros y mantener este nivel en los próximos tres años.