Un hombre limpiando un horno.

Un hombre limpiando un horno. iStock

Vivir

Ni bicarbonato ni limón: la mezcla de dos ingredientes que deja mi horno impecable

Publicada

El horno es uno de los electrodomésticos más utilizados en la cocina para cocinar, haciendo que se llene de suciedad complicada de eliminar en muchos de los casos, sobre todo si no se limpia con cierta regularidad. Con el uso comienza a acumularse masa en el fondo, que puede llegar a desprender malos olores e incluso se impregna en las preparaciones elaboradas.

Es por ello por lo que es imprescindible limpiar el horno con regularidad y de la forma correcta, y para ello se puede recurrir a un truco casero para limpiar el horno con dos ingredientes que tenemos en la cocina, y que no es ni el bicarbonato de sodio ni detergente, dos aliados habituales a la hora de llevar a cabo diferentes tareas de limpieza.

Afortunadamente, no es necesario recurrir a productos repletos de químicos nocivos para la salud para eliminar toda la suciedad del horno, pues es suficiente con usar dos ingredientes que prácticamente todo el mundo tiene en su cocina. Con esta combinación se consigue abrillantar el electrodoméstico y dejarlo impoluto, como recién comprado.

Cómo limpiar el horno de la cocina

El bicarbonato de sodio se utiliza con frecuencia como ingrediente de limpieza, pero en este caso se prescinde del mismo para apostar por una combinación de vinagre blanco y sal de cocina, siendo suficiente con mezclarlos a partes iguales para crear una especie de pasta, que una vez aplicada sobre la superficie del horno, va a eliminar la suciedad impregnada, así como restos de grasa y sobras de comida del fondo del electrodoméstico.

Antes de empezar a limpiarlo hay que asegurarse de que el horno está apagado y frío antes de comenzar con la limpieza. A continuación, en un recipiente hay que combinar a partes iguales una mezcla de vinagre de limpieza con sal hasta que se forme una pasta espesa que actuará como desengrasante. Con ella habrá que frotar tanto las paredes como las ranuras del horno, dejando actuar durante unos 15-20 minutos.

Luego, hay que frotar con una esponja o cepillo las partes o superficies más difíciles, enjuagando con un paño húmedo hasta que se retiren todos los residuos de la mezcla. Si algunas manchas persisten, habrá que repetir el proceso, para finalizar secando el interior usando un paño limpio antes de volver a utilizarlo.

De esta manera, con este sencillo truco casero se puede mantener el horno libre de humedades y en unas óptimas condiciones para el siguiente uso.

Otros trucos para limpiar el horno

Limpiar la suciedad quemada de las paredes del horno es más complicado de lo que pueda parecer, pero con el sencillo truco casero con vinagre blanco y sal de cocina es mucho más sencillo.

Sin embargo, existen otras alternativas a las que recurrir para poder limpiar el horno de forma sencilla y de una manera rápida. Algunas de las más destacadas son las siguientes:

Rascar con una piedra pómez

Un truco consiste en usar una piedra pómez, que normalmente se usan para eliminar las durezas de los pies, para rascar la suciedad del horno. La porosidad de la piedra hace que se pueda rascar fácilmente la suciedad adherida a las paredes del electrodoméstico sin necesidad de usar otros productos químicos.

Vapor de amoníaco

Para limpiar el horno también puede ser muy útil hacer uso de vapor de amoníaco. Para que este actúe sobre las paredes del electrodoméstico hay que colocar una olla con agua hirviendo en la parte inferior del electrodoméstico, además de un recipiente con amoníaco en una rejilla superior.

Con estos dos envases en el interior del electrodoméstico, hay que cerrar la puerta del horno durante 10 minutos. Pasado este tiempo, gracias al vapor que resultará, hará que la grasa adherida a las paredes del horno se despegue de manera mucho más sencilla.

Bicarbonato de sodio y vinagre

Otro truco para la limpieza del horno pasa por espolvorear bicarbonato de sodio en el fondo del horno para luego rociarlo con vinagre. Al momento, se podrá ver que la mezcla reacciona y se forma una espuma. Tras 15 minutos dejando que actúe, se podrá limpiar la suciedad y conseguir eliminar de forma más sencilla.

Pasta de detergente

También se puede recurrir a un truco casero para el que solo se necesitará preparar una pasta con agua y detergente para lavavajillas. Mezclando ambos productos se conseguirá una pasta espesa que habrá que aplicar sobre las paredes del horno.

Una vez que estén bien cubiertas, hay que dejar que la mezcla repose durante 10-15 minutos, para posteriormente retirar toda la suciedad usando un paño húmedo.

Precalentamiento del horno

Otra de las opciones a las que se puede recurrir es calentar el horno a temperatura media durante varios minutos, para que cuando ya esté caliente, se apague el electrodoméstico. En ese momento, con mucho cuidado para no quemarse, se podrá rascar la suciedad, que ya se habrá reblandecido.

De esta forma, existen distintas opciones a las que se puede recurrir para limpiar de manera eficaz el horno, si bien, el mejor de los trucos que se puede aplicar es el de no acumular suciedad, procediendo a una limpieza regular del electrodoméstico para evitar que llegue a haber demasiada suciedad en las paredes.

Así será mucho más sencillo poder limpiar el horno en cada ocasión en la que se necesite, además de que contribuirá a disfrutar de más higiene en la cocina y poder disfrutar de una mayor vida útil del propio horno.