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Artesanía Silvent: diseño y creación de juguetería de madera desde Caldas de Reis

En 2011, Guillermo Rocha se introdujo de lleno en el mundo de los juguetes de madera a raíz del nacimiento de su primer hijo; tiempo después, la afición se convirtió en negocio y actualmente trabaja bajo el sello de Artesanía de Galicia
Guillermo Rocha de Artesanía Silvent
Cedida
Guillermo Rocha de Artesanía Silvent

Dedicado toda su vida a la carpintería, el destino tenía preparado para Guillermo Rocha Silvent un salto sin retorno desde la creación de muebles al mundo de la juguetería de madera. El nacimiento de su primer hijo en el año 2011 marcó un antes y un después en la vida laboral de este artesano: "me convertí en juguetero a raíz de estar reparando los juguetes de plástico de mi hijo. Al ver que algunos de ellos no tenían arreglo decidí empezar a hacerlos yo mismo", relata Rocha. Ese fue el germen de una afición que fue evolucionando hasta convertirse en lo que es a día de hoy Artesanía Silvent en Caldas de Reis: todo un referente en el mundo de los juegos y juguetes ―sostenibles y hechos a mano― bajo el sello inconfundible de Artesanía de Galicia.

Más allá de su relato personal, el "Taller Obradoiro" de Guillermo esconde detrás de su nombre otra bonita historia familiar: José Silvent, más conocido por Barriga Verde, era el bisabuelo de este artesano gallego. Natural de Perpiñán (Francia), Silvent fue el "fundador del guiñol popular gallego a mediados del siglo XX"; y Barriga Verde uno de los personajes más singulares y reconocidos de sus espectáculos de títeres. En honor a la emblemática figura de su bisabuelo, Guillermo decidió tomar su segundo apellido para nombrar el negocio y así mantener, de alguna forma, el legado artístico de la familia.

Juguetería única y hecha a mano

Juegos y juguetes de Artesanía Silvent. Foto: Cedida

A la hora de crear sus piezas, Guillermo encuentra la inspiración en los momentos de la vida cotidiana e incluso en su memoria. "A veces, hay cosas que me surgen de los recuerdos de cuando era niño", comenta. Es el caso de una báscula didáctica hecha en madera de pino ―que favorece la motricidad fina y la imaginación― que evoca a las balanzas que antiguamente usaban las pescantinas para vender sus productos.

En otras ocasiones, los juguetes de Artesanía Silvent no son más que el reflejo de los vistazos diarios al entorno de su creador, como es el caso de los característicos camiones de madera. También, de las viejas películas han surgido algunos de los productos más emblemáticos del "Taller Obradoiro" de este artesano: los "Fórmula 1" antiguos, con un clásico diseño retro y disponibles en diferentes colores. Y es que da igual si es por tierra, mar o aire… La línea temática de vehículos de juguete de madera es de las más completas y demandadas en Artesanía Silvent.

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Todas estas ideas, sin importar su naturaleza, continúan por un proceso productivo similar. "Imagino lo que quiero hacer en mi cabeza y después lo plasmo directamente en la madera", aclara Guillermo. "Ese es mi proceso de diseño. No hay dibujo ni nada, voy sobre la marcha", añade. Después, sobre un tablero de madera juega con las formas o las curvas de cada pieza hasta llegar al producto final, que según aclara el artesano: "tiene que pasar un criterio bastante amplio". Al fin y al cabo, todos son juegos y juguetes dirigidos a un público infantil, por lo que cada detalle es importante para su diversión y seguridad. "Cuantas menos piezas sueltas lleve el juguete, mejor", explica. 

Cada uno de los modelos de madera de Artesanía Silvent es único y diferente, fabricados y pintados manualmente uno a uno, utilizando barnices y pinturas con base al agua y menos contaminantes. Son productos de gran durabilidad, sostenibles y 100% ecológicos. Además, los juegos y juguetes de Artesanía Silvent que pueden ser también reparados, restaurados o renconvertidos en objetos de decoración. Un trabajo al completo que su creador define como "muy laborioso", sobre todo a la hora de completar el estocaje de ciertos juguetes. Dependiendo de las piezas a fabricar, Guillermo puede dedicarle más de un mes o mes y medio para cada tanda nueva.

Vehículos de Artesanía Silvent. Foto: Cedida.

En el extenso catálogo del artesano, podemos encontrar desde varitas de magos o hadas, hasta trenes evolutivos, palas de playa, zapatitos ata cordones, pizarras, o juegos de tres en raya, entre otros muchos. Todos estos productos pueden adquirirse a través de la página web de Artesanía Silvent, así como seguir de cerca los pasos y novedades en las redes sociales de la marca.

Pandemia y artesanía

La llegada de la pandemia también ha sacudido al sector de la artesanía. Privados de las tradicionales ferias de diseño ―tanto a nivel nacional como internacional―, muchos de los artistas de Artesanía de Galicia han visto desvanecerse una de las principales vías para vender sus productos y dar a conocer sus marcas. "Están las cosas un poco difíciles, pero hay que seguir peleando hasta que la gente se de cuenta de que lo artesano, los productos únicos, son algo bueno", afirma. "Deberíamos apoyar más aún al pequeño comercio (...) Los que vivimos en el rural tratamos de emprender en él para generar riqueza y una forma de vida", reflexiona el artesano. 

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En lo que respecta a su "Taller Obradoiro" y los pedidos de jueguetes, Guillermo nos confiesa haber notado un importante cambio en la tendencia a la hora de comprar por parte de sus clientes. "Ahora la gente no está con intención de gastar", comenta. "La venta ha bajado bastante…Vendí más en el año 2019 que en todo el 2020 y 2021", asegura. Pese a todo, este artesano de Caldas de Reis no pierde la ilusión y las ganas de seguir llenando los hogares de las personas con los diferentes juegos y juguetes únicos que crea desde Artesanía Silvent.

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