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Ayer y hoy de tres edificaciones históricas en Cambados

Un recorrido a través de las viviendas más emblemáticas de esta localidad que mantiene uno de los conjuntos históricos mejor conservados de toda Galicia
Vista aérea de Cambados.
Vista aérea de Cambados.

Además de ser conocida como la capital del vino Albariño, la localidad de Cambados está considerada por muchos como un auténtico museo al aire libre. Este municipio gallego atesora uno de los conjuntos históricos mejor conservados de toda Galicia ―declarado Bien de Interés Cultural―, donde destacan, entre otras cosas, sus numerosos y bien conservados pazos señoriales, casas nobles o infinidad de monumentos. De entre todo este callejero local, en esta ocasión queremos detenernos en tres singulares y emblemáticas viviendas que también forman parte del patrimonio y legado histórico cambadés como son la Casa das Cunchas, la Casa Fariña y la Casa dos Fraga.

Casa das Cunchas

Casa das cunchas, Cambados. Foto: Shutterstock

Justo detrás del reconocido edificio del Pazo de los Fajardo, La Rúa Muelle en Cambados alberga una de las joyas arquitectónicas más llamativas y fotografiadas de la localidad cambadesa. Conocida por todos como Casa das Cunchas, la vivienda fue construida durante el siglo XIX con claros retazos del estilo neobarroco gallego. Sin embargo, cabe destacar también que esta casa-torre se emplaza en el mismo lugar donde antaño se encontraba una casa hidalga de principios del siglo XVIII.

La fachada principal de la Casa das Cunchas está decorada con conchas de vieira (de ahí su nombre)  y sillares de piedra que marcan el carácter particular ―y marinero― de esta vivienda familiar perteneciente a los Otero Candeira. Según parece el edificio fue utilizado en otros tiempos por los pescadores del municipio. En lo que respecta a su exterior, en su parte delantera también sobresale una pequeña balconada, numerosos ventanales forjados en hierro y por supuesto, la torre anexa a la parte lateral izquierda, la cual se compone de hasta tres niveles.

Casa Fariña

Casa Fariña, Cambados. Foto: Concello de Cambados

Nos trasladamos hasta la calle Hospital en Cambados, muy próxima a la plaza de Alfredo Brañas, para conocer otra de las construcciones que forman parte de este legado histórico del municipio: la Casa Fariña, también conocida por el nombre de Casa de Cauto. A primera vista nos encontramos ante un edificio sin grandes ornamentaciones, perteneciente en su origen a un conocido procurador, Don Luis Fariña. La casa consta de apenas dos plantas, con una entrada principal enmarcada en un arco de tipo adintelado. 

Si bien en la actualidad no se sabe con certeza la fecha exacta de la construcción de la vivienda, la primera constancia escrita nos lleva hasta el año 1728, cuando la casa fue comprada por un tal Don Luciano Fariña Couto. Desde entonces la titularidad de la misma ha ido fluctuando y de hecho en sus columnas todavía se pueden observar varios escudos pertenecientes a las distintas familias nobles que la han habitado, entre las que se encuentran los Torres Valladares, los Figueroa o los Sarmiento. 

Casa dos Fraga

Casa dos Fraga, Biblioteca Municipal de Cambados. Foto: Páxinas Galegas

La actual Biblioteca Municipal de Cambados, también llamada Casa dos Fraga, supone otra buena muestra del patrimonio histórico de esta villa gallega. El edificio en cuestión fue levantado en el siglo XIX y se encuentra ubicado junto a la Iglesia de San Francisco. De hecho, es muy probable que la propiedad fuese erigida sobre los terrenos que antaño albergaban el claustro de dicha iglesia, que en épocas pasadas fue el Convento de San Francisco. El concello de Cambados se hizo con la propiedad en el año 2005, restaurando el espacio para acoger una biblioteca pública que en la actualidad dispone de varias salas expositivas y de ordenadores.

Pero sin lugar a dudas, los jardines son uno de los elementos más llamativos de la Casa dos Fraga gracias en gran medida a la frondosa vegetación y ornamentación que cubre todo el exterior. Entre las esculturas del espacio podemos distinguir un busto del escritor Miguel de Cervantes, el monumento de un niño pensativo o un gran libro tallado en piedra en el que se pueden leer unos versos del poeta local Ramón Cabanillas.

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