Diez claves para el pesimismo y el optimismo con el Celta en el parón de selecciones
La situación no es, ni de lejos, la esperada. El Real Club Celta afronta el primer parón de selecciones en la 18º posición con tan solo un punto y un gol a favor. Una angustia que se prolongará, como mínimo hasta el próximo 12 de septiembre cuando visite al Real Madrid.
El final de la temporada pasada, donde se igualó de nuevo el récord de victorias consecutivas y se rozó la carambola europea, invitaba al optimismo para un nuevo curso. Eduardo Coudet renovaba con un proyecto a largo plazo, que por el momento no termina de arrancar.
Sin embargo y pese a que muchos indicadores hacen saltar las alarmas en parte de la afición, la experiencia de otras temporadas puede ser capaz de rebatirlos. Estos son los diez motivos para el optimismo y el pesimismo:
1) Peor arranque desde el 2016...cuando se llegó a dos semifinales
Las cifras actuales tienen una comparación incluso peor desde el regreso a Primera. En el arranque de la temporada 2016/17, el Celta de Berizzo no lograría ganar hasta la jornada 5 tras perder ante Leganés, Real Madrid y Atlético y empatar ante Osasuna.
Sin embargo, aquel comienzo lleno de dudas y con la fase de grupos de la Europa League fue solo un lunar en la temporada más brillante de la historia del club. Berizzo haría malabares en tres competiciones, manteniéndose en la pelea por Europa hasta la jornada 30 y las semifinales de Copa del Rey o las de UEL ante el Manchester United.
2) Ninguno de los titulares está a su mejor nivel...pero la segunda unidad responde
Ni Nolito, ni Aspas, ni Santi Mina, ni Denis Suárez. La mayor parte de los jugones del equipo se muestran aún lejos de su mejor rendimiento, lo que hace que la Chachoneta aún no haya alcanzado su velocidad de crucero. Solamente algunos fichajes como Dituro y Galán o el de nuevo internacional Brais Méndez mantienen el tipo.
Sin embargo, uno de los principales puntos flacos se ha corregido. Si hace unos meses se achacaba la falta de fondo de armario de un Coudet que se aferraba a su once tipo; ahora sus apuestas tácticas parece que responden. Solari, Fran Beltrán o Cervi rindieron a un gran nivel en sus oportunidades y aspiran a ingresar en el once.
3) Desgaste físico y falta de ritmo...pero con 35 jornadas por delante
El importante trabajo físico realizado por el primer equipo esta pretemporada puede estar también detrás del bajo rendimiento. Además, la planificación deportiva no permitió ver ningún choque contra equipos de cierta relevancia.
De esta forma comenzaban los celestes la competición oficial con un ritmo distinto al deseado. Ese desgaste físico inicial podrá dejar sus frutos más adelante, y es que al Celta le quedan aún 35 partidos de Liga y una Copa del Rey que ilusiona y mucho. Y es que los puntos valen lo mismo ahora que en febrero, simplemente hay que optimizar los esfuerzos.
4) Una preocupante falta de pegada...aunque Aspas nunca arranca bien
Es el pilar del club y su principal termómetro, y es que rara es la ocasión en la que sin Aspas el equipo funciona bien. Y aunque logró mojar en la primera jornada ante el Atlético, ya ha perdonado varias ocasiones que pudieron valer puntos.
Sin embargo, este falta de olfato es más habitual de lo que creemos aunque las causas sean siempre diversas. En 2016 no anotaría hasta la jornada 5, mientras que el año siguiente no lo lograría hasta el octavo partido. Incluso la temporada pasada, con tres goles en tres jornadas, tardó en recuperar unos registros que suelen mejorar con la llegada del otoño.
5) Una mayor competencia por la zona noble de la tabla...pero con un equipo ambicioso y compacto
Pese al gran mercado del Celta, donde destaca especialmente la incorporación de Javi Galán; Felipe Miñambres no es el único que ha hecho los deberes este verano. El Mallorca con Ángel y Kang In Lee, el Elche con Lucas Pérez o el Betis con Bellerín han logrado también fichajes de un nivel superior al que "aspiran".
Eso apretará aún más la competitividad de las zonas noble y media de la tabla. Y aunque La Liga ya no tenga a figuras como Messi, Ramos o Mbappé, la lucha por la clasificación a Europa promete ser a cara de perro incluso entre los humildes.
Sin embargo, el Celta cuenta a su favor con la experiencia del año pasado como punto de partida más avanzado. La Chachoneta puede jugar de memoria al ser un bloque sin grandes cambios este verano. Además, Coudet y varios jugadores han dejado clara su ambición ante cotas mayores. Y es que para que las cosas sucedan, primero hay que imaginarlas.
