Rosario Miguel Coloma / Ama de casa
7/10/1934, Cervera del Río Alhama, La RiojaMadrid, 27/03/2020
Querida mamá, hace un mes desde que te has ido y todos seguimos llorando tu pérdida. Este es nuestro pequeño homenaje, ya que ni pudimos acompañarte en tu marcha, ni despedirte como te merecías.
Nuestra madre, además de guapa por fuera, fue una mujer muy bella por dentro. Una gran mujer con ganas de aprender siempre, tenaz hasta que conseguía sus propósitos, lista, rápida mentalmente y perspicaz. Quiso siempre superarse en todo, tanto en lo intelectual como en lo personal.
Esa mente despierta e inquieta por aprender que siempre demostró es la que le permitió manejar un teléfono moderno, y a nosotros acompañarla desde la distancia, en esa habitación de hospital de la que ya no regresó, y así verla y decirle cuánto la queríamos por última vez.
Protectora y valiente, nunca se achantaba por nada ni por nadie. Este virus te pilló luchando contra otra enfermedad que entonces nos daba miedo nombrar, cáncer, pero nos enseñaste que siempre hay que seguir luchando.
Generosa y buena, siempre dio todo por su familia anteponiéndonos incluso sobre sí misma, como en sus últimos momentos, preocupándose por nosotros desde el hospital cuando era ella la que preocupaba.
Con carácter fuerte y un carisma inolvidable, pero con un gran corazón en el que entrábamos todos. Siempre trató de protegernos y ayudarnos aún por encima de sus posibilidades y edad.
Nos enseñaste que hay que estar orgulloso de nuestros orígenes llevando siempre el amor por tu pueblo en el corazón, el sitio en el que querías descansar y al que debido a esta locura que está viviendo el mundo, todavía no hemos podido llevarte.
Estamos seguros que tu enorme fe en Dios te ayudó en tus últimos momentos, cuando nosotros no estábamos ahí para darte la mano.
Mamá, no ha sido suficiente tiempo, nunca es bastante cuando se quiere como todos te queríamos a ti. Te echaremos de menos el resto de nuestras vidas, pero nos sentimos muy afortunados de haberte tenido a nuestro lado.
Tu marido Aurelio, hijas Judith y Almudena nietos Álvaro, Pablo, Cayetano y Gabriela, yerno Antonio, hermanos, familia y amigos no te vamos a olvidar nunca!
Por Judith y Almudena García Miguel, hijas de Rosario.
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