Juani Ossorio Quilez / Ama de casa y otros trabajos
29/10/1933, AlbaceteValencia, 12/04/2020
Siempre contabas que el día en que naciste se helaron los campos de azafrán en la Mancha allá por el año 33 y ése sólo fue el preludio de lo que iba a acontecer. Viviste una guerra de la que pese a tu corta edad recordabas con toda profusión de detalles y una durísima posguerra en la que tuviste que trabajar desde los cinco años ayudando a tu padre en sus quehaceres como sastre junto con tu hermano Juan. Uno de los días más felices de tu infancia fue tu comunión, que tomaste luciendo unas alpargatas rotas y con un trozo de pan de maíz como único banquete.
A los 13 años abandonaste la Mancha para irte a trabajar a Valencia con una familia acomodada cuidando a su hija de 30 años que sufría una parálisis cerebral de nacimiento. Tú hiciste que esta chica hablara por primera vez para asombro de sus padres y te escapabas con ella al cine para su desespero, aunque pronto te lo permitieron cuando comprobaban lo feliz que era su hija por primera vez en su vida.
Después conociste a mi padre y te casaste con él al mismo tiempo que traías a toda tu familia a Valencia en vuestra flamante casa de alquiler situada en la zona del puerto hasta que todos ellos se labraron su propio futuro en esta ciudad.
Así pasaron casi 20 años sin que ni la providencia ni la medicina consiguieran que tuvieras descendencia hasta que llegué yo en el que fue el día más feliz de tu vida y cuando ya habías perdido todas las esperanzas.
Hace 10 años que murió papá y ambos nos apoyamos. Desde ese momento dejaste de ser solamente mi madre para convertirte en mi mejor amiga y mi confidente. Siempre estabas ahí para brindarme todo tu apoyo y para animarme en mis momentos más bajos pues sólo tú podías conseguirlo.
Te fuiste a los 86 años un 12 de abril, Domingo de Resurrección, rebosando vida e inteligencia por todos tus poros y en tus últimos años no sólo no perdiste tu luz sino que lucías con más fuerza y sabiduría que nunca.
Echo de menos esas largas charlas que teníamos todos los días hace tan sólo unos meses, tus buenos consejos, tu compañía, cuando nos íbamos de compras o veíamos series en streaming juntos que fue uno de tus últimos pasatiempos que compartíamos. Tus favoritas eran 'La Casa de Pape'l, 'Anne with an E', 'Downton Abbey' y 'Doctor Who'.
Ahora me doy cuenta de lo perfecta que era la vida simplemente estando tú. Te echo de menos cada segundo de mi vida pero ahora tienes que volar alto. Quizás nos volvamos a ver, no soy creyente como tú pero mantengo las esperanzas y de hecho es mi gran motivación para seguir adelante.
Te quiero mamá.
Por Pedro, hijo de Juani.
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