Ángel Aguilera Domínguez / Empleado de IBERIA jubilado
19/06/1935, MadridMadrid, 19/03/2020
Hola papá, te voy a decir “hola viejo“ como si aún estuvieras aquí.
Llevas más de dos meses sin estar entre nosotros y aunque últimamente cada vez estabas más ausente no terminamos de acostumbrarnos a tu falta. Mamá estaba muy acostumbrada a tenerte cerca y te echa mucho de menos. Se siente sola, pero queremos que sepas que, como siempre, cuidamos de ella, como lo hacíamos contigo solo cuando te dejabas, CABEZOTA GRUÑÓN.
Queremos que sepas que te hemos querido mucho. En ocasiones sabes que nos has enfadado mucho y todos lo hemos pasado mal, son cosas que pasan en las familias. En tus últimas y terribles horas que pasamos juntos en el hospital nos agarrabas la mano y no parabas de darnos las gracias. Te estabas despidiendo y no paro de recordar el miedo de tu mirada. Perdona si no estuvimos contigo el tiempo suficiente. Las gracias son para ti, los hijos siempre tenemos que ser agradecidos con los padres.
Si donde estés te llegan estas palabras, queremos que sepas que se nos ha ido un trozo de nuestra vida. Aquí seguiremos aguantando. Ni te imaginas las cosas que han pasado después de irte tú, el mundo ha cambiado.
Que lleves buen viaje, en avión o mejor conduciendo tú mismo un cochazo que es lo que seguro que más te gustará, poniendo siempre el intermitente y la directa hacia el cielo.
Ahora te mandamos muchos besos, con lo que te gustaban... Ahora nos damos cuenta que no fueron suficientes. Adiós, Padre, y como te encantaba decir, SALUD!! Brindaremos por ti.
Por Ángel, hijo de Ángel.
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