El homo sapiens es una criatura fascinante, empeñado hasta el infinito en demostrar que es un ejemplo de un nombre mal puesto. Pocos lugares se ve más claro esto que en un juzgado, donde los individuos de esta peculiar especie se esfuerzan en lanzarse trapos sucios a la cara con tal de erigirse ganadores.

Por suerte, las redes sociales son un lugar ideal donde los jueces pueden desahogarse ante las peripecias narradas por los demandantes y demandados, para que el resto del planeta podamos regocijarnos ante tan fascinantes historias. Como por ejemplo esta en la que los principales ingredientes son unas gambas estresadas y los pedos de un vecino.

@Lapelo1 es una jueza que combina en su timeline sus aventuras como jurista y como motera. En esta ocasión ha contado una delirante historia de un juicio de faltas en la que unos "cuescos descomunales" y unas gambas estresadas cobraban todo el protagonismo ante todo un bloque de vecinos que por lo que parece poco tienen que envidiar a los de Aquí no hay quien viva:

Pero... ¿y la resolución del caso? El público ha preguntado:

Y algunos de sus colegas han recordado alguna historia parecida: