Dolores, a la izquierda; a la derecha, el supermercado donde se habrían esparcido sus restos.

Dolores, a la izquierda; a la derecha, el supermercado donde se habrían esparcido sus restos. SOS Desaparecidos | Efe

Reportajes

Miguel Gallego, el exguardia civil de 70 años que descuartizó a su mujer Dolores y escondió los restos por toda Gran Canaria

Denunció su desaparición en plena pandemia. En uno de los interrogatorios policiales, sin embargo, reconoció que habían tenido una pelea a puñetazos.

D. J. D.
Publicada

Corría el 18 de marzo de 2020 y apenas había pasado una semana desde que se había decretado el confinamiento de la población por la crisis sanitaria de la Covid-19, cuando Miguel Gallego Pousada le perdió la pista a su mujer. Sin embargo, pasaría prácticamente un año hasta que se presentó en comisaría para denunciar lo ocurrido. 

Narró entonces que había ido antes a comisaría, pero nunca se llegó a presentar denuncia. Había ido a comunicar que su mujer había abandonado el hogar, aunque era algo habitual: se iba unos días y luego volvía. Nunca se registró denuncia, según los medios locales, porque se trataba de una persona adulta y ella había dejado una nota para que no la buscasen.

Además, se dijo que había una nota en la que aseguraba que no la buscasen. Sin embargo, posteriormente habría una denuncia ante SOS Desaparecidos. 61 años, reza el cartel. 1,65 metros, 85 kilogramos. Pelo corto, liso y rubio. Con los ojos castaños y de complexión gruesa. De origen catalán, era cocinera y administrativa. Tenía dos hijas fruto del matrimonio con Gallego.

Su marido, Miguel Gallego Pousada, estaba jubilado. Era un exagente de la Guardia Civil. Denunció los hechos y comentó lo de la nota. 

Canarias7 adelantó que esta semana, después de casi cinco años de búsqueda, el exbenemérito debía prestar declaración en calidad de testigo presuntamente. Sin embargo, durante el mismo, acabó por confesar que había matado y descuartizado a su esposa durante aquel mes de marzo de 2020.

Crimen machista

La Policía Nacional ha logrado esclarecer este crimen machista después de cinco años de investigación. El hombre, al derrumbarse, confesó su versión de lo ocurrido.

Gallego afirma que el 18 de marzo de 2020 tuvo una fuerte discusión con María Dolores, su mujer. Según narró, ella le propinó un puñetazo. Él, lejos de estarse quieto, le respondió de la misma manera.

Contó a los agentes que comenzó entonces un forcejeo. Gallego y su mujer pelearon hasta que ella cayó hacia atrás y se golpeó la cabeza con el suelo. 

Presuntamente, esta fue la causa de la muerte. Al menos, eso es lo que narra Gallego, que apuntó que había esperado varias horas al lado del cadáver para ver si respondía y solo había sido un desmayo.

Cuando comprobó que su mujer había fallecido, no llamó a la Policía Nacional ni a sus excompañeros de la Benemérita. Decidió entonces descuartizar a su mujer y hacer desaparecer el cadáver.

Durante dos días narró lo que había hecho. Había cortado el cuerpo de su mujer en trozos muy pequeños. Los había colocado, según explicó Canarias7, en un plástico y los había dejado sacar durante unos días en el salón de su casa.

Como era una época en la que la población estaba confinada, Pousada aprovechó sus pocas salidas para introducir el cuerpo descuartizado en una mochila. Los restos los dejó por diferentes puntos de la parte sur de Gran Canaria.

Cuenta Canarias7 que, tras la confesión, se encontraron restos humanos colocados en calles anexas a un centro comercial de la playa del inglés. Presuntamente, los huesos y las partes del cuerpo en descomposición encontradas serían de María Dolores Illán Méndez. En la casa también se halló sangre.

Miguel Gallego apunta que usó para descuartizar a su mujer una sierra, un cuchillo y un martillo. Los investigadores creen difícil que eso ocurriera.

Violencia de Género

El Tribunal Superior de Justicia de Canarias ha detallado que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de San Bartolomé de Tirajana ha acordado el ingreso en prisión de Miguel Gallego a lo largo de este jueves. El detenido se ha acogido a su derecho a no declarar ante la instructora.

Por el momento, se mantiene el secreto de sumario sobre el caso. Ha sido el Tribunal Superior de Justicia de Canarias el único que ha dado algunos datos al respecto del presunto crimen machista.

En caso de confirmarse, se trataría del primer crimen machista conocido en Gran Canaria en este 2025. Sin embargo, el conocimiento de este asesinato engrosaría la lista de fallecidas por este tipo de casos en el año 2020. En total, serían 46 las mujeres asesinadas en un año marcado por la pandemia de la Covid-19. En este caso, no se conocían denuncias previas por malos tratos.