Las islas de desconexión en Galicia están en Lugo y en Ourense
Más de medio millón de gallegos llegan al 25 % de cobertura en 5G. Los datos, publicados por el Ministerio de Economía y Transformación Económica, detallan el mapa de conectividad en Galicia a junio de 2021, y desvelan patrones, algunos ya conocidos en la región y otros más sorprendentes.
La tecnología del 5G permite una mayor velocidad de datos móviles, con lo que las descargas o el tiempo de espera a que cargue una web, se disminuyen. Si con el 4G la velocidad máxima de descarga es de un giga por segundo, con la red actualizada se podría llegar a 20 gigas. España es uno de los países de la Unión Europea con una mayor cobertura de esta tecnología, pero todavía presenta algunos problemas de instalación en entornos despoblados y rurales.
En Galicia, los 539.349 vecinos que apenas tienen cobertura se dividen en el territorio en 182 municipios. En 81 localidades sus habitantes no tienen ningún tipo de cobertura 5G y se ven obligados a depender de la velocidad del 4G. Es sobre todo llamativo la islas que se dibujan en el mapa, que se reconocen como áreas mayoritariamente rurales, que se especializan en productos agrarios. Estas son también zonas que están perdiendo población y que tienen dificultades para reemplazar generacionalmente a sus trabajadores. Su exclusión del mundo tecnológico no hace más que ahondar en estas diferencias y desanimar aún más a los gallegos de establecerse en estas zonas, donde es más difícil ya no sólo emprender sino incluso poder relacionarse con amigos y familiares
Ourense es la provincia más afectada, donde la media de cobertura 5G es de apenas 16%. Le sigue Luego con una media de algo más del 20% de instalación. La media gallega apenas llega al 28%, pero se ve superada por las provincias occidentales de A Coruña (40%) y Pontevedra (38%).
Como ya viene siendo normal ver en mapas gallegos, la autopista Ap-9 es el gran tronco de Galicia, ya que no solo conecta las áreas metropolitanas más pobladas, sino que permite a las localidades por la que atraviesa beneficiarse de la infraestructura. Los ránkings de mayor cobertura se siguen manteniendo en las áreas metropolitanas de A Coruña (95,89%) y Vigo (91,76%), mientras que en las provincias de Lugo y Ourense más de 300.00 de los vecinos no pueden disfrutar de la alta velocidad móvil.
Mejor cobertura de banda ancha
El informe del ministerio también señala las debilidades que todavía persisten en Galicia en cuanto a la instalación de banda ancha. En velocidades de 30 MBps, el mapa gallego se mantiene más homogéneo, con buena parte del territorio estando cubierto casi por completo, sin las llamadas "zonas blancas".
Es en las cifras de cobertura de velocidad superior a los 100 MBps donde vemos, cómo, a pesar del avance hecho en los últimos años, las mismas islas de desconexión todavía son prominentes en Lugo y Ourense. Las redes fijas superan al 5G en su alcance a los gallegos, pero todavía dejan importantes huecos sin un internet rápido.
La instalación de la fibra óptica, FTTH, ya marca una mayor diferencia entre zonas. Lugo por ejemplo, se presenta como la provincia con peor instalación de fibra que llega al hogar incluso en municipios que reciben a un mayor número de visitantes, como puede ser Sarria o Palas de Rei. Son 30 localidades las que carecen de una instalación de al menos el 25% en líneas de comunicación óptica. Es más del doble que en A Coruña, donde el número se reduce a 12, en Pontevedra (11) y en Ourense 13.
Para revertir esta situación y conseguir una conectividad digital de alta velocidad, el Gobierno de España está abriendo este mes convocatorias para la ayuda de instalación de este tipo de infraestructuras. Dotadas con un presupuesto total de 250 millones de euros, el Ministerio de Economía busca que el programa UNICO-Banda Ancha cubra a unas 728.500 nuevos hogares y empresas del territorio.
En Galicia , estas acciones podrían ayudar a unos más de 137.00 hogares que no llegan al 30 % de cobertura de velocidad de 100 Mbps. Las instalaciones estarán apoyadas por recursos europeos del Plan de Resiliencia y tiene como objetivo llegar a una tasa de cobertura del 95% en todo el territorio español en el 2025. En la última convocatoria proyectos en las cuatro provincias gallegas recibieron casi 52 millones de euros para poder llegar a la meta.
