La tasa turística en Santiago podría recaudar 3 millones de euros pero no se aplicaría hasta 2025
La tasa turística podría aportar unos 2,5 o 3 millones de euros a Santiago de Compostela, aunque no estaría en vigor hasta 2025. Así lo ha expresado el ayuntamiento en una reunión con el sector hostelero esta mañana, en la que el gobierno local también propuso que los fondos recaudados por este gravamen fuesen destinados a la rehabilitación y mantenimiento de la ciudad histórica.
En esta primera reunión en el Palacio de Raxoi han estado presentes tanto el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo, como el concejal de Turismo, Sindo Guinarte, acompañados por los representantes de las asociaciones hosteleras y el catedrático de derecho financiero y tributario de la USC, César García Novoa. Este último ha sido el autor del informe que ha presentado el equipo local para la implantación de la tasa turística.
La reunión ha sido valorada positivamente tanto por el Ayuntamiento como por la mayoría de entidades presentes y, de acuerdo con el alcalde, existe un consenso para contar "cun procedemento o máis seguro e simplificado posible desde o punto de vista da súa tramitación e o máis equilibrado posible en canto á distribución da contía entre os diferentes tipos de establecementos".
Entre las posibles finalidades a las que se podrían destinar los fondos recaudado el regidor ha destacado la rehabilitación de la ciudad histórica, la cobertura del sobrecoste del impacto turístico en ciertos servicios o la organización de actividades que contribuyan a la desestacionalización del turismo. Con todo, Bugallo ha señalado que el dinero no serviría para "financiar o funcionamento ordinario da administración nin dos servizos públicos".
Durante su intervención García Novoa, el autor del informe, detalló el proyecto que busca crear un "modelo de imposto aliñado coas tendencias que existen noutras Comunidades Autónomas do Estado e noutras ciudades de Europa". El nuevo gravamen sería de tipo autonómico con exigencia voluntaria para las entidades locales, que podrán recaudar para "sufragar os sobrecustos dos servizos turísticos que estimen oportunos". La propuesta señala que el turista tendría que liquidar la tarifa en el momento de hacer check-out en los alojamientos.
Una tasa entre los 0,50 y los 2,50 euros
El estudio propone una tasa de entre 0,50 y 2,50 euros dependiendo de la categoría del establecimiento, e incluiría los pisos turísticos, un precio "moderado" para eludir un gran impacto en la demanda. En total se estime que al año este gravamen podría recaudar entre 2,5 y 3 millones de euros, en la media de otras comunidades autónomas. El informe valora también la época del año en el que se podría aplicar esta tarifa, xa sea a lo largo dde todo el año o solo coincidiendo con la temporada alta.
La propuesta será presentada al resto de portavoz de la corporación municipal así como al Consello de Administración de INCOLSA, para después volver a reunirse con las asociaciones del sector hostelero. "Unha vez que teñamos recabadas todas estas opinións, remitiráselle á Xunta de Galicia o informe técnico acompañado das observación que consideramos que habería que incorporar", explicó el alcalde.
Será el gobierno autonómico el que tendrá que definir el marco legal para que después Raxoi elaborar la ordenanza fiscal correspondiente con una memoria económica y hacia donde irían los fondos, algo que retrasaría la entrada en vigor de la tasa turística hasta el 2025.
Asociaciones de hostelería
Desde la asociación de Hostalaria.gal se han mostrado a favor del impuesto turístico, pero consideran necesaria que los fondos recaudados sean distribuidos por un ente aparte, que esté formado por diferentes miembros de la sociedad compostelana.
La entidad empresarial presidida por Lois Lopes opina que este dinero tendría que ir a compensar al resto de la sociedad par sufragar el coste medioambiental y social derivado del turismo. Entre las actuaciones que proponen para que se destine lo recaudado por el gravamen está la preservación y recuperación del medio rural, el fomento de la desestacionalización, la conservación del patrimonio histórico, así como el impulso de proyectos para la diversificación económica y la mejora de la formación y calidad del empleo, entre otras medidas.
Hostalaria.gal opina que la tarifa tendría que ser aplicada por día y por fracción apra no penalizar al visitante con más poder adquisitivo. Igualmente, la asociación busca que en este impuesto se pueda incluir también el turismo de excursiones, dado el bajo rendimiento económico que producen. Finalmente, sugieren que se bonifique el gravamen en la temporada baja.
