Entrevista a Nani García, el artífice de la banda sonora de la película gallega 'Valentina'

Artífice de bandas sonoras de infinidad de serie de televisión y películas, el coruñés Nani García está detrás de la música de Valentina, el filme gallego nominado a los Goya a Mejor Película de Animación. Esta película, en cines desde el 10 de diciembre, tiene la firma de la ferrolana Chelo Loureiro y se trata de una historia musical sobre la diversión y la inclusión que cuenta con el sello musical de este reputado compositor gallego.

La película cuenta una historia de inclusión en la que su protagonista, Valentina sueña con ser trapecista, pero cree que nunca podrá conseguirlo por tener síndrome de Down. Su abuela le anima siempre a seguir adelante. "Es una película para niños pero la trama también la pueden seguir los mayores", cuenta Nani García, cuyas composiciones musicales acompañan la acción de este filme que está siendo muy bien recibido entre el público.

Antes de ser estrenada en cines, esta película ya fue aplaudida por el sector del cine, logrando su nominación a los premios Goya. Una nominación que, para García, ya supone "un gran premio".

Autor de bandas sonoras para largometrajes de animación y ficción, obras de teatro, cortometrajes, programas de TV, este compositor ya ha vivido la experiencia de participar en películas galardonadas con Goya, e incluso en una con un Oscar. Sin embargo, vive esta nueva carrera hacía estos galardones del cine español con toda la ilusión, tal y como nos comenta en la entrevista concedida a este medio.

Esta misma semana ha tenido lugar el preestreno de Valentina en el Teatro Colón de A Coruña. ¿Cómo ha sido la acogida entre el público?

Fue muy bien, totalmente entusiasta. Todo ha funcionado a la perfección. Había padres y niños, porque aunque la película es para niños la trama también la pueden seguir los mayores. La película trata el tema de la inclusión y, precisamente, fueron muy aplaudidas las niñas con síndrome de Down que pusieron la voz. La gente aplaudió tanto al final como en algunas canciones. Fue muy bien, la verdad.

¿Cómo surgió la posibilidad de hacer esta banda sonora?

Yo colaboro con la productora, y en este caso también directora de la película, desde hace muchos años. Es una productora que trabaja mucho la animación, y en especial la animación de autor. Resultan proyectos muy interesantes porque en ellos la música tiene un papel muy importante.

¿En qué te inspiraste para crear la música de este filme?

Nunca sé en qué me inspiro, pero está claro que las imágenes y la historia siempre inspiran a uno. En esta ocasión, esta película tiene las características de tener 8 canciones, además de la música incidental (que va acompañando a la acción); por ello las canciones hubo que hacerlas antes de tener las imágenes. Se hizo a partir de la letra y con el espíritu infantil que queríamos, y después del resto de la música viene inspirada por las propias imágenes. Al final todo ello conforma un conjunto que quedó coherente y que funciona emocionalmente.

¿Se podría definir en tres palabras la banda sonora de Valentina?

Yo diría que es una música emocionante y funcional al mismo tiempo. Es efectiva al mismo tiempo emociona. Son dos aspectos que siempre persigo cuando hago música para audiovisual, pero en este caso más. La animación cuenta una historia muy emotiva. Había que componer música que acompañe la acción pero que tampoco cargase de emoción.

¿Cómo recibes esta nominación a los Goya?

La película llegó un poco tarde a la nominación y seguramente ahí hayamos perdido alguna que otra nominación. La película se está estrenando ahora y las nominaciones ya fueron, por lo que la gente no tuvo oportunidad de conocer la música, el guion, la historia... Los académicos no tuvieron esa oportunidad, como sí la tuvieron con otros filmes que se estrenaron en verano. En todo caso, estar nominados es un gran premio. Yo ya participé en las películas Arrugas, que se llevó dos Goyas; así que ya tengo la experiencia de lo que es participar en una película premiada con Goyas, aunque yo directamente no los he llevado (risas).

Llevas años creando bandas sonorosas para películas de animación. ¿Qué diferencia hay a la hora de crear la música para este tipo de películas respecto, a lo mejor, a las de acción?

Es más intenso. La música acompaña más a las imágenes. Así, mientras que en ficción tú puedes poner la cara de un actor en un plano cercano durante 15 segundos, en animación la imagen nunca puede estar quieta, siempre hay movimiento. Este movimiento es aplicable a la música, que está muchos más minutos acompañando a la acción. Hay menos tiempos muertos. Esta singularidad de las películas de animación te obliga a hacer una música más cercana a la acción, mientras que la música en serie de televisión es más tranquila a nivel de montaje.

¿Crees que las bandas sonoras tienen la relevancia suficiente en el público?

La música del cine es una música aplicada, está al servicio de los valores de la historia. Dependerá mucho del director y este puede depender de que la banda sonora tenga más o menos relevancia en momentos concretos de la película. Es un recurso más.

¿Qué te queda por componer?

Muchas cosas, pero no sé si tendré energías para todos (risas). Ahora tengo pendiente un encargo para la próxima temporada de la Orquesta Sinfónica de Galicia, también estamos dando los primeros pasos para hacer otra ópera. Me gustaría hacer un cuarteto de cuerda, que lo tengo pendiente, estoy terminando un sonata de piano... En enero voy a grabar a Oporto el último disco de Nani García Trio, creo que será el último porque me van faltar energías (risas). Y alguna peli más que está en proyecto de ejecución.

¿Y algo que sueñes con hacer?

Me gustaría llegar a hacer algún disco de piano solo, pero no voy a poder porque necesitaría mucho tiempo.