Varios bares de A Coruña cierran hasta nuevo aviso por "responsabilidad y seguridad"
Entrevista: Cambios de mesas o insultos al personal: por qué ha cerrado el Central Park de A Coruña
La fase 1 de desescalada que la ciudad herculina estrenó ayer tras casi 60 días de confinamiento hizo que decenas de personas salieran a la calle para regresar a las terrazas que decidieron recuperar su actividad además de que el día acompañó con un sol radiante y temperaturas agradables. Las precauciones que se debían tomar por parte de los establecimientos eran claras: distancia de al menos dos metros entre mesas y reducción de los aforos de los locales. Por su parte, los ciudadanos debían procurar respetar la denominada "distancia social" pero las normas fueron ignoradas en algunos casos y eso ha provocado que varios bares coruñeses como el Central Park de la Plaza de Vigo y La Gata de la Ciudad Vieja hayan decidido cerrar un día después de la reapertura como medida de "concienciamiento social" apelando a la "irresponsable actitud de una minoría y con el objetivo de mantener la seguridad de clientes y empleados" a la vez que recordaron que "el estado de alarma sigue vigente".
En concreto, la dirección del Central Park y del Roots Urban Food, ha emitido un comunicado acompañado de una imagen en la que se puede apreciar claramente que este lunes las mesas estaban dispuestas con al menos dos metros de distancia entre ellas. En los siete puntos que forman parte del documento, la dirección de ambos establecimientos especifica que "se siguieron las normativas de la Consellería de Urbanismo de la ciudad herculina respecto al número de mesas y separación y con la colaboración in situ de la Policía Local", además de que aseguran que "se establecieron protocolos internos de seguridad y salud" y "se especificaron las normas de uso de la terraza para los clientes en carteles y en las redes sociales". Por último, concluyen recordando a los clientes que "no olviden los 26.920 fallecidos registrados en España a causa de la pandemia" y les recuerdan que "aún permanecemos en estado de alarma por emergencia sanitaria".
Por su parte, la responsable de La Gata ha explicado esta tarde en redes sociales que no ha abierto hoy "para dejar descansar a los vecinos que deben de estar asustados y con razón" debido a "una minoría peligrosa sin ningún tipo de conciencia ni respeto". "Lo que pudo ser un día feliz se ha convertido en un día penoso por culpa del comportamiento de algunos. Los hosteleros no somos policías y no podemos responsabilizarnos del comportamiento de la gente, pero sí pagar las consecuencias", critica la dueña del local, a lo que añade que "ya ha avisado a varias personas de que no vuelvan al local" y anuncia que mañana, miércoles 13 de mayo, abrirá "con otras medidas y más preparada por si vuelve a ocurrir algo similar a lo del lunes". "Voy a abrir mañana con ilusión, no la misma con la que abrí ayer porque es imposible, pero hay que seguir peleando", comenta.
Twitter ha sido la principal herramienta a través de la cual los vecinos de la ciudad han canalizado sus protestas tanto ayer como hoy, sobre todo a través de imágenes en las que se podían ver aglomeraciones en algunas terrazas, personas tomando algo que no respetaban la distancia de seguridad con sus acompañantes en la mesa y mesas que estaban más próximas de lo debido. Estas escenas no han pasado desapercibidas para los medios nacionales, ya que esta mañana una cadena de televisión retransmitía en directo desde A Coruña una imagen del Paseo Marítimo en la que, según la reportera, "asustan los miles de personas" que salieron a la calle a disfrutar del buen tiempo durante las primeras horas de la fase 1.
El ayuntamiento de A Coruña también ha tomado cartas en el asunto tras este comportamiento ciudadano y ha difundido hoy un comunicado en el que pide responsabilidad ante el incumplimiento de ayer en varias terrazas, al mismo tiempo que la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña ha lamentado a través de otro comunicado que "el comportamiento de ayer de algunos hosteleros ha perjudicado a todos". La asociación y el gobierno local también mantuvieron ayer de noche una reunión de urgencia con la alcaldesa de A Coruña, Inés rey, y el colectivo ha manifestado que la regidora apuntó a que no les iban a sancionar el primer día, pero que "a partir de ahora se incoarán expedientes que podrían alcanzar los 6.000 euros si se detectan irregularidades".
