La hostelería seguirá cerrada en Galicia y cuando reabra lo hará con control de aforos
El próximo lunes, 22 de febrero, tras una nueva reunión del comité clínico el presidente de la Xunta anunciará si comienza la desescalada gradual de la hostelería en Galicia. Así lo ha anunciado Núñez Feijóo en su comparecencia de este mediodía, donde aclaró que esta desescalada se realizaría estudiando la situación epidemiológica concreta de cada área y territorio y siempre que los datos de la comunidad sigan en descenso en cuanto a contagios, número de casos activos y presión hospitalaria.
El dirigente autonómico apuntó que no se realizan cambios de momento en las duras restricciones vigentes en el sector porque "la hostelería y los domicilios son los lugares en los que se está más expuesto porque tenemos más motivos para sacarnos las mascarillas". En este sentido, Feijóo apeló a la prudencia debido a que la comunidad se encuentra en pleno proceso de vacunación, al mismo tiempo que están presentes en este contexto sanitario nuevas cepas. "Tenemos que afianzar lo conseguido para dar ese paso", dijo en referencia a la reapertura de bares y restaurantes.
Decenas de núcleos de población en Galicia y personas de edad avanzada
El presidente de la Xunta, adelantó que se está estudiando un sistema de control de aforos para los establecimientos con un funcionamiento mediante código QR, pero no confirmó que esto finalmente vaya a realizarse de este modo porque subrayó que "en Galicia hay muchos núcleos de población con miles de personas de edad avanzada, a los que si se les pide un QR podría producirse cierta discriminación tecnológica". "Vamos a buscar una solución para imprimir el mayor control posible, aún no hay concretadas herramientas y se optará por las más factibles de implementar", expuso.
Núñez Feijóo aseguró que la Xunta va a trazar con los hosteleros un plan de hostelería segura, "un protocolo para que cuando se abran los bares haya más posibilidades de que estén abiertos en un horizonte de más tiempo", afirmó. A su vez, el sistema de control que estudia el gobierno autonómico tiene como objetivo garantizar la máxima seguridad a la hora de entrar en los establecimientos y también ante posibles rebrotes. "Queremos que cuando los ciudadanos entren en un bar sepan el máximo de personas que pueden estar dentro y es obligatorio que los locales indiquen en la entrada el límite máximo de aforo con distancia de 1,5 metros entre mesas"
Además, también se propone un sistema de seguridad ante posibles brotes, que consistiría en realizar un registro de entrada que posteriormente permita cribar a los clientes y detectar a los que hayan estado alrededor de un positivo en algún local. Por último, el presidente de la Xunta apuesta en esta vuelta de la hostelería por un máximo control, por lo que ha anunciado que esto dependerá de los responsables de los establecimientos y las fuerzas y cuerpos de seguridad, a la vez que se llevará a cabo un plan de inspección que se solicitará a los alcaldes gallegos y que será necesario para la reapertura.
Áreas de servicio abiertas para transportistas
El gobierno de Galicia también ha decidido que los transportistas tendrán a su disposición los restaurantes de las estaciones de servicio y los de la Vía de Altas Prestaciones para comer individualmente durante sus jornadas laborales.
En cuanto a la movilidad y no convivientes en la comunidad, Feijóo reiteró que "la intención si las cifras siguen acompañando, es que a medida que abra la hostelería se vaya incorporando la posibilidad de verse con no convivientes", todo ello unido a la reapertura parcial de los gimnasios. Unas decisiones que aún tendrán que esperar a la evolución de la pandemia durante esta semana.
