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Eliminan la Fuente de San Pedro en las obras de Concheiros en Santiago de Compostela

Esta misma mañana los vecinos del Barrio de San Pedro mostraban su sorpresa y pesar al ver como las obras que se están acometiendo en la zona de Concheiros arrasaban con la Fonte da Cruz de Concheiros, un espacio colectivo de uso comunitario que además es un Bien de Interés Cultural ubicado en un casco histórico declarado en 1985 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO

Se trataba de una fuente con unas características muy sencillas pero que albergaba parte de la historia y tradición del barrio y es que las fuentes tenían una gran importancia económica en las urbes puesto que generaban oficios relacionados con la recogida y el reparto de agua, normalmente un trabajo llevado a cabo por mujeres que repartían en las diferentes casas recipientes llenos de agua. Además las fuentes eran lugares de encuentro, como sucedía en los lavaderos, en los que se producían relaciones sociales. 

Estos oficios que mencionamos fueron desapareciendo a medida que el agua corriente fue llegando a todos los hogares, mediante la instalación de pilones o la compra de diferentes electrodomésticos que hicieron que la labor de estas mujeres ya no fuese necesaria.

Así estaba antes la fuente (Fuente: Compostela Verde)

En concreto en el Barrio de San Pedro esta fuente tenía mucha importancia porque, al tratarte de una zona extramuros, tardó más tiempo en ver como se construía la estructura necesaria para llevar a los hogares el agua y por tanto se le dio mucho uso comunitario.

Han sido varios los vecinos que esta misma  mañana han dado muestra del descontento y la preocupación  por este acontecimiento que según ellos pone de relieve la falta de conservación y respeto al mobiliario que al encontrarse dentro del Casco Histórico de Santiago de Compostela (Patrimonio de la Humanidad) sería un Bien de Interés Cultural.

La fuente, ahora desaparecida, estaba muy próxima al Cruceiro que da nombre a la plaza donde se aloja, entre la Costa do Vedor y la Corredoira das Fraguas, enfrente del local de hostelería A Tasquiña y se trataba de una fuente de piedra incrustada en el muro de una de las viviendas del barrio, en una zona que estaba protegida del tráfico por un pequeño muro de piedra que evitaría las caídas debidas al desnivel de la calle. Contaba con una estructura muy similar a las fuentes que se pueden encontrar a lo largo y ancho del rural gallego, sin molduras ni elementos decorativos. En el caso de la de San Pedro el tanque estaba formado por tres piedras rectangulares que complementadas con el muro de la pared, formarían el depósito.

Así era la Fonte de Santa Cruz

Por ello y por las declaraciones patrimoniales se trataba de un espacio que debeser conservado y protegido puesto que forma parte de la memoria colectiva del barrio compostelano. Además, después de un accidente de tráfico sucedido en el año 2018, en pocas semanas se acometieron labores de reparación y restauración, recolocando piedras y devolviendo la colocación original, algo que los compostelanos celebraron.

El espacio estaba integrado en la pequeña plaza que diseñó el compostelano Francisco de Pons Sorolla y Arnau en el tercer cuarto del siglo XX, un arquitecto considerado esencial en la revitalización de Compostela pero que no estuvo exento de críticas al emplear técnicas  y criterios de restauración que actualmente han quedado obsoletos.

Los habitantes y comerciantes de la zona de San Pedro y Concheiros llevan sufriendo las consecuencias de unas obras que se prolongan más tiempo del que se anunció y que han originado múltiples problemas de suministros, tráfico y diferentes incidentes que han afectado a todo el barrio.  

Las obras en estos momentos

Algunos de los vecinos de la zona han manifestado su intención de realizar una protesta colectiva exigiendo la recolocación de la fuente en su lugar de origen pero por el momento se desconoce si el plan urbanístico de las obras que se están acometiendo tiene esto contemplado. 

Este incidente pondría una vez más de relieve la falta de comunicación entre el Concello y los vecinos y comerciantes del barrio que ya han reclamado en reiteradas ocasiones la transparencia en lo que consideran una gestión deficiente.

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