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El juicio por el Pazo de Meirás, situado en el Concello de Sada (A Coruña), arranca mañana

Es un "momento histórico" para terminar "con la vergüenza y anomalía histórica y democrática que supone que el inmueble siga siendo detentado por los herederos del dictador", aseguró el alcalde del municipio donde se localiza el edificio
El pazo de Meirás.
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El juicio por el Pazo de Meirás arranca mañana en la antigua sede de la Audiencia de A Coruña con expectativas para que pase a ser un "bien público". La Abogacía del Estado es el demandante y, además, constan como intervinientes a favor de la devolución del inmueble a la propiedad pública los ayuntamientos de Sada y A Coruña, la Deputación da Coruña y la Xunta de Galicia.

Seis personas de la familia de Francisco Franco y una sociedad mercantil figuran como demandadas. El proceso se inició hace tres años, cuando el Parlamento gallego le encargó a una comisión de expertos comprobar si era posible reincorporarlo al patrimonio público. El inmueble fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2008 por el Gobierno bipartito entre el BNG y el PSOE.

El Concello de Sada, municipio en el que se encuentra localizado el Pazo de Meirás, emitió una nota en la que indica que "estamos viviendo un momento histórico". "El de terminar de una vez con el avergonzante anacronismo de que los herederos del dictador detenten la propiedad de un pazo incorporado a su patrimonio personal como resultado de compra-ventas nulas y con fondos económicos resultado de la estorsión forzada o de la contribución de las propias administraciones públicas", recoge el ayuntamiento en una nota.

La representación legal del municipio coruñés "insistirá" en que la posesión de la familia Franco no fue de buena fe. "Las administraciones públicas tienen el mismo objetivo común, el de terminar de una vez por todas con la vergüenza y la anomalía histórica y democrática que supone que el inmueble siga siendo detentado por los herederos del dictador y reparar la memoria de todas aquellas víctimas que sufrieron el expolio y la represión de la dictadura de Franco", aseguró el alcalde de la localidad, Benito Portela.

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