El Atlantic Pride se repetirá en A Coruña en 2020 tras el éxito de su primera edición
El Atlantic Pride tendrá segunda edición. El primer festival LGTBQI+ que se ha celebrado entre los días 7 y 13 de julio en la ciudad de A Coruña ya está preparando su regreso en 2020 después de superar en esta primera edición todas las expectativas de público que manejaba la organización.
El 'Pride' ha venido para quedarse. Y es que, dado el éxito rotundo de esta primera edición, la organización se muestra convencida de que este festival "se quedará para siempre" en la ciudad herculina, que "estaba necesitada" de una celebración de este estilo.
Los nervios y la incertidumbre se apoderaban de César Perez, Iván Cervo y Luis Pazos, organizadores de este evento y con los que tuvimos el placer de hablar hace tan solo 15 días. Ahora, dos semanas después, todo se ve desde otro punto de vista. Después de unos días de mucho ajetreo, hablamos con César Perez, uno de los organizadores de este evento que ha dejado huella en la ciudad herculina.
Se convertirá en una cita ineludible
El Atlantic Pride se convierte así en un cita ineludible en el calendario estival de la ciudad. Y es que, tal y como nos ha adelantado César, habrá segunda edición de esta festival, que seguirá tenido lugar "la segunda semana se julio", justo después de la celebración del Orgullo en Madrid.
Pese a arrancar el domingo 7 julio, las jornadas centrales fueron el pasado fin de semana. Un fin de semana en el que abundaban las citas de ocio: feria medieval en Betanzos, la fiesta del pulpo en Mugardos... En el fin de semana de las tradicionales fiestas del Carmen, A Coruña se vistió de color con la celebración del Festival Atlantic Pride.
El festival, que se presentaba para ser el "orgullo del norte" y hacerse un hueco en el panorama festivo del ambiente LGTBQI+ del norte de España, daba comienzo el pasado domingo 7 de julio con la celebración de una fiesta ABBA, donde hasta pudimos ver bailar a la alcaldesa Inés Rey en un ambiente más festivo que reivindicativo. Una fiesta en la que la afluencia de público ya dejaba entrever el éxito que cosecharía esta primera edición del Atlantic Pride. De hecho, acudió tanta gente a este fiesta que se agotó el suministro de cerveza.
Con este evento lúdico e integrador, comenzaban las activiades del Atlantic Pride que a lo largo de esta semana contó con charlas, exposiciones, cine, presentaciones literarias y, sobre todo, mucha música en directo.
Así, el lunes 8 de julio fue la inauguración de “El Ogro”, una instalación artística del polifacético Javier Codesal, pionero del videoarte en España. Al día siguiente, Patricia Freire y Lucía Suárez hablaron sobre la “Invisibilidad: el papel de la bisexualidad en el activismo LGTB. Transformando miradas: buenas prácticas para el profesorado en la atención al alumnado trans”.
Las mesas redondas tuvieron una gran acogida, de hecho fue necesario colocar más sillas para que todos los asistentes se pudiesen sentar a escuchar a los ponentes, como ocurrió el viernes 12 de julio con Mar Ortega que realizó un repaso por los “30 años de activismo LGTBI” en la Fundación Luis Seoane, justo después de la proyección del Ciclo “visibLes”.
Éxito rotundo
En las dos últimas jornadas no faltó el cine, las charlas ni la música que, a partir del viernes, se trasladó al escenario ubicado en los jardines de Méndez Núñez, en donde actuaron Arufe, Presumido, Kika Lorace y L¥G. Allí el público bailó hasta altas horas de las madrugada, al igual que en la jornada del día siguiente.
El sábado el protagonista fue la Casa Azul, que dio un concierto en el que interpretó los temas de su último trabajo, “La Gran Esfera”, así como sus grandes clásicos como “La Revolución Sexual”. La afluencia de público a este concierto superó las expectativas de la organización.
"Fue muy emocionante", ha asegurado César, que ve muy "satisfactorio" el que A Coruña pueda contar, por fin, con un evento 'Pride'.
De cara a la próxima edición, la organización se plantea "hacer cosas diferentes". Ahora, más que hablar del futuro, es momento de festejar el éxito logrado. Está claro: el Atlantic Pride ha venido para quedarse .
