Geluca Naya, de Casa Lola de Arteixo (A Coruña)

Geluca Naya, de Casa Lola de Arteixo (A Coruña) O Grilo Arteixo.

Ofrecido por:

A Coruña

Triste adiós a Geluca Naya, alma del histórico Casa Lola de Arteixo (A Coruña)

  • Actualmente, el mítico restaurante se conoce como Bar & Grill 1906. Dejó de estar en manos de la hostelera cuando se jubiló en los 2000 tras décadas entre fogones aprendiendo los secretos de cocina de su madre, Lola
  • Te puede interesar: Los restaurantes míticos coruñeses que cerraron sus puertas
Publicada
Actualizada

Un local histórico se ha apagado esta semana en Arteixo (A Coruña) debido al fallecimiento este jueves de Angélica Naya, más conocida como Geluca y alma de Casa Lola, uno de los restaurantes más populares de la zona con décadas de trayectoria. La hostelera tenía 92 años y durante 20 estuvo al frente del establecimiento hasta que se jubiló en el 2000.

Tenía dos hijos, María Isabel y José Manuel Suárez y varios nietos, Lucía, Dolores, David, Geli y Verónica, además de otros allegados queridos como hijos políticos, bisnietos, sobrinos, ahijados o primos. El funeral se oficiará este viernes 13 de diciembre a las 17:00 horas en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de Pastoriza y el cuerpo está siendo velado en el tanatorio Apóstol. 

Con esta pérdida, se apaga definitivamente la luz de Casa Lola, que continuó su actividad bajo el mismo nombre pero sin Geluca de la mano de Antonio Calvete y que posteriormte pasó a denominarse restaurante Mela. Actualmente es conocido como Bar & Grill 1906.

La madre de Geluca, Lola, fue quien le enseñó todo de cocina y en los inicios en los fogones daba de comer a militares y decenas de peregrinos que se dirigían al Santuario de Pastoriza, teniendo muy buena acogida especialidades como callos, guisos o el estofado.

Geluca comenzó a trabajar con su madre en el negocio en los años 40 cuando era menor de edad y desde ese momento aprendió todo lo necesario para que Casa Lola fuera todo un éxito años después.

Antes de Casa Lola, madre e hija trabajaban en otro restaurante distinto, pero este mítico local de Arteixo nació en los 80. Pocos años después murió la matriarca, Lola, y tras jubilarse Geluca su hija continuó durante un tiempo con el negocio aunque finalmente decidió orientar su vida profesional a la pastelería.

De hecho su negocio, Pastelería Mari, está abierto en Pastoriza. Elabora dulces artesanales como magdalenas, bizcochos, roscas y roscones, entre otras golosas opciones.