Investigadores de la Universidad de Ferrara han descubierto un virus del beso que puede estar relacionado con los casos inexplicables de infertilidad en la mujer.

El mundo de los virus es inquietante y fascinante a partes iguales. Estas pequeñas “formas de vida” han desarrollado mecanismos de lo más peculiares para invadir al huésped y asegurar su reproducción. Los hay que a través de la sangre llegan a sus células huésped favoritas, mientras que otros con el roce de unas manos, a través de fluidos como el sudor, tienen al alcance una nueva víctima.

Y los besos no se van a salvar. No es ninguna novedad que el beso pueda transmitir algún que otro virus, de ahí a que nos conciencien a limpiar bien los vasos, el gollete de las botellas o incluso el cepillo de dientes. Pero este tipo de virus no suele ser demasiado peligrosos, causando como mucho síntomas febriles que te dejarán en cama durante alguna que otra semana. O eso creíamos.

Un beso que podría acabar con tu fertilidad

HHV-6

El más popular es el virus del beso, causante de la mononucleosis infecciosa. El causante de esta enfermedad, que suele producir síntomas de cansancio, debilidad y algo de destemplanza, se conoce cómo virus de Epstein-Barr, un herpevirus que se transmite a través de la saliva.

Pero también tenemos otro protagonista, que es responsable del 20% de las hospitalizaciones infantiles en los Estados Unidos: el HHV-6. Se relaciona con el beso, pero hasta el momento nadie ha encontrado ninguna relación con la infertilidad en mujeres.

¿Cómo funciona este virus? Pues realmente sabemos muy poco de el, pues tanto su variante HHV-6A cómo HHV-6B suelen producir una infección silenciosa, lo que quiere decir que hasta pasado un tiempo no hace visible los síntomas. Por suerte, disponemos de muchos métodos para detectar la presencia de virus y bacterias, con estudios diferenciales y comparativos entre personas sanas y enfermas, por lo que los investigadores aprovecharon para analizar que estaba pasando.

El gran misterio del virus del beso

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Con un total de 30 participantes, siendo la totalidad mujeres con una infertilidad inexplicable, los investigadores encontraron que el 40% de ellas tenía una infección por HHV-6A en el útero.

Pero no solo eso, se encontró que las mujeres que poseían el HHV-6A tenían unos niveles anormales de citoquinas. Estas proteínas señalizadoras nos dan una información muy importante sobre la posible relación entre este virus y la infertilidad, pues están asociadas con la formación del huevo fertilizado y el feto.

No existe tratamiento para este virus, y los resultados de esta investigación sugieren que el virus del beso es el causante del 10% de los casos inexplicables de infertilidad en mujeres. Se necesita una profundización en el estudio para poder concretarlo con total certeza, y aun más para elaborar un tratamiento que podría ahorrarnos el costoso proceso de fertilización artificial.