En esta página siempre hemos defendido la igualdad de sexos utilizando argumentos científicos para explicar que tanto hombres como mujeres tenemos las mismas capacidades.

Sin embargo, no podemos negar que biológicamente somos diferentes y aunque eso no tiene nada que ver a la hora de ser tratados como iguales, sí que es cierto que lleva a que nuestro organismo no se comporte del mismo modo bajo determinadas situaciones.

Un buen ejemplo es el del sistema inmunológico, ya que hace años que se llevan a cabo estudios sobre la forma tan distinta en la que hombres y mujeres nos defendemos de las infecciones. Y precisamente del último de estos estudios es del que os vamos a hablar hoy, ya que por fin parece encontrar causas concretas a este fenómeno tan curioso.

¿Cómo funciona el sistema inmunológico de hombres y mujeres?

hombre-mujer

Como os decía, hace años que existen indicios sobre el modo tan distinto en el que el sistema inmunológico de hombres y mujeres reacciona ante una infección.

Uno de los primeros casos que llevó a ahondar en este misterio tuvo lugar en 1992, cuando la Organización Mundial de la Salud tuvo que retirar a toda prisa una vacuna contra el sarampión al darse un gran número de casos de muertes de niñas en Senegal y Haití. Nunca se supo por qué los niños sí habían sobrevivido a aquel incidente, pero quedó claro que el sistema inmune de ambos sexos debía tener algo que ver, por lo que muchos científicos comenzaron a investigar sobre ello.

Desde entonces algunos investigadores han afirmado que la opción más probable es que evolutivamente las mujeres hayamos desarrollado una respuesta inmune más rápida e intensa con el fin de proteger al feto en desarrollo en caso de embarazo,aunque lamentablemente la otra cara de la moneda es que esa respuesta se puede volver contra nosotras.

Esto tiene mucho sentido, ya que existen muchos más casos de mujeres que de hombres con enfermedades autoinmunes, pero aún así hasta ahora no se conocían las causas biológicas que llevaban a que esto ocurra.

¿Cuáles son los factores que causan esta respuesta inmune diferente?

Cromosomas

Según los resultados presentados la semana pasada en un congreso sobre Microbiología de la ciudad de Boston, existen varios factores que influyen en el hecho de que la respuesta inmunológica de hombres y mujeres sea tan distinta.

Durante el desarrollo del congreso unos científicos de la Universidad de Tasmania expusieron el caso de una vacuna contra la tuberculosis que recientemente había sido probada en Gambia mostrando que, curiosamente, en las niñas se inhibía una proteína antiinflamatoria, favoreciendo con ello una mejor respuesta inmune, pero no daba lugar a resultados similares en niños.

A la hora de buscar cuáles eran los factores implicados en este misterio, surge la duda de la posible implicación de las hormonas sexuales, ya que son totalmente diferentes en ambos sexos y, como cabía esperar, parece ser que sí están relacionadas, ya que los estrógenos parecen implicarse en la respuesta antiviral, mientras que la testosterona suprime la inflamación.

Coinciden con esto un grupo de investigadores de la Universidad Johns Hopkins, que han estudiado los efectos de tratamiento de las células nasales con compuestos similares a los estrógenos, comprobando que tras la exposición al virus de la gripe sólo las mujeres respondían al tratamiento hormonal y luchaban contra el virus.

Por otro lado,  investigadores del Centro Médico Universitario de Utrecht afirmaron en un estudio anterior que parece haber causas genéticas asociadas a una proteína llamada TLR7, cuya función es detectar los virus y activar la respuesta del sistema inmunológico. Dicha proteína se encuentra en el cromosoma X y parece ser que evita los mecanismos utilizados por el organismo de las mujeres para evitar la sobreexpresión del contenido del segundo cromosoma X, por lo que aporta una mejor protección en comparación con los hombres, que sólo tienen una copia.

¿Cómo puede beneficiar a la salud humana este descubrimiento?

vacunas

Aunque parezca trivial, llegar a este tipo de descubrimientos no ha sido fácil, ya que por un lado hay quién considera impropio estudiar las diferencias entre sexos y, por otro, a menudo los ensayos clínicos sólo incluyen a hombres debido a que los ciclos menstruales puede complicar los resultados, por lo que estas diferencias han permanecido enmascaradas durante muchos años.

Sin embargo, ahondar en ello será muy beneficioso, ya que puede servir para el desarrollo de vacunas específicas de sexo capaces de producir una respuesta inmune ajustada a casos concretos y evitando con ello efectos como los que hemos mencionado a lo largo del artículo.

Sí que hay diferencias entre hombres y mujeres, eso es innegable, pero ninguna nos convierte en mejores ni peores, sino en organismos biológicamente diferentes.