Hace un tiempo os contamos cuáles serían las bases científicas de los superhéroes; hoy vamos a hablar de materiales ficticios.

Igual que con los superhéroes, la gente que se dedica a escribir ciencia ficción, atribuyen propiedades extraordinarias a nuevos materiales ficticios pero manteniendo (de ahí que no sea solo ficción) una cierta base científica. Esta base científica es a la que nos agarramos nosotros para la entrada de hoy.

La idea es suponer que estos materiales ficticios existen de verdad e intentar adivinar cómo serían internamente si de verdad existieran en nuestro mundo sin romper las leyes de la física. Para ello hemos seleccionado una pequeña muestra representativa de la gran colección de materiales ficticios que se pueden encontrar en los mundo de ciencia ficción.

Adamantio, uno de los materiales ficticios por excelencia

Material ficticio

El adamantio es sin lugar a dudas el material ficticio más conocido de cuantos se han inventado. Desde el exoesqueleto de Ultron hasta los huesos y garras de Lobezno, este material es uno de los más comunes en ciencia ficción, y tiene una historia bastante interesante. Su nombre proviene de otro material ficticio mucho más antiguo: el adamantito. Este material fue concebido en la antigua Grecia y tenia unas propiedades que nos sonaran familiares: es impenetrable e indañable.

Suena bastante parecido al adamantio que conocemos, aunque en esta revisión más moderna aparece como un metal pero guarda muchas de las propiedades, incluída la raíz griega “adamastos” que significa: indomable. Uno inmediatamente piensa en el diamante como lo más parecido que tenemos a nuestro alcance, pero no es así; el diamante es relativamente frágil a los golpes y más importante, es inestable. Esto significa que cuando lo calentamos, vuelve a convertirse en la pieza inicial de grafito que algún día fue.

De lo que podemos estar seguros es de que este material tiene propiedades similares a la fibra de carbono, al titanio e incluso a la concha de ciertas especies de “cangrejos”. Esto se traduce en un material ficticio que para ser real debería tener una estructura atómica y macroatómica muy particular. De esta forma en lugar recibir toda de los impactos en un punto y esperar que no se rompa, este material ficticio repartiría la presión por toda la estructura haciéndolo muchísimo más resistente.

Vibranio, otra maravilla fruto del orden interno

Vibranio

El vibranio es otro material bastante común en el mundo de ciencia ficción. Este material se distingue por se capaz de aguantar cualquier tipo de vibración y utilizarlo para su provecho. Oficialmente este material resiste las vibraciones absorbiendo su energía a través de los enlaces atómicos de las moléculas que lo componen; una forma muy ingeniosa de protegerse, pero que tiene sus problemas en la vida real.

Las formas en las que los enlaces atómicos puede contener más energía son principalmente 2: energía potencial y energía vibracional. Uno diría que un material ficticio como el Vibranio utilizaría vibraciones para guardar dicha energía, pero esto significaría que ante ataques suficientemente fuertes nuestra pieza de Vibranio se calentaría inmensamente haciendo inviable fabricar un escudo de este material (como el del capitán américa) o incluso llegando a fundirse.

Sin embargo, si la energía se almacena como energía potencial, esto significa que los átomos se juntarían más y acabaríamos con una pieza más pequeña que la inicial, lo cual tampoco es bueno. Es por eso que mi forma favorita es una combinación de ambas en la que nuestro supuesto escudo de Vibranio absorvería en un primer momento, la energía como potencial y la liberaría de forma controlada en forma de vibración. Uno puede imaginarse incluso suficiente ingeniería como para que las vibraciones se produjeran solo en los bordes del escudo haciendo siempre posible sujetarlo para defendernos.

Kryptonita, el mayor enemigo de Superman

kryptonita

La Kryptonita es el material ficticio que aparece en los cómics de Superman y que le produce debilidad, devolviéndole a un estado de “solo-hombre”. Existen infinidad de tipos de Kryptonita, pero todo guardan características comunes como la radioactividad y su efecto sobre Superman, aunque en diferentes grados alguno tipos llegando incluso a dejar de surtir efecto tras tiempos de exposición prolongados. ¿Qué material en la Tierra podría tener este tipo de propiedades?

Como primeros candidatos tenemos cualquier elemento radiactivo, la verdad. El problema es que los efectos sobre Superman varian en gran medida y, más importante aún, sólo algunas variedades de este material ficticio afectan a los humanos. Es por eso que lo único que podemos imaginar es algún tipo de elemento radiactivo de baja intesidad, como las microondas, que tenga un efecto devastador en Superman al interactuar con algún punto biológico diferente del nuestro. Pero claro, eso significaría que un móvil en funcionamiento podría actuar como Kryptonita.

Australio, es el turno de los videjuegos

Australium

De los cómics pasamos a los videojuegos con un material ficticio menos conocido, pero eso es solo porque vamos a coger carrerilla para el último de los materiales. El Australio, como ya habréis imaginado, se descubrió en Australia y aparece en el videojuego Team Fortress 2 como combustible de algunos vehículos y armas, y con una característica muy especial. Tras largos periodos de exposición el Australio te vuelve más inteligente, pero también más “hombre” y más barbudo.

Y esto, evidentemente, nos lleva directamente al campo de los materiales radiactivos. Un material radiactivo, como el Uranio o Plutonio, son una gran fuente de energía, prácticamente inagotable si se sabe usar. Además la radiación causa mutaciones, que en la vida real siempre han sido malas, pero que no tienen por qué serlo en teoría. De hecho cada vez más son los estudios que buscan (y dicen haber encontrado) algunos tipos de radiación que son buenos para ciertos animales.

Si uno piensa en ello, la idea no es tan descabellada; al fin y al cabo la radiación solar en cantidades moderadas no sólo mejora nuestro humor sino también mejora el funcionamiento de nuestro cuerpo. Es por tanto fácil imaginar un futuro en el que pudiéramos encontrar un material cuya radiación nos beneficiara no solo como fuente energética sido además a un nivel fisiológico. Habrá que esperar y ver qué hacen los australianos.

Redstone, el secreto de Minecraft

redstone

Y llegamos a nuestro último meterial ficticio: el Restone the Minecraft. Este es indiscutiblemente uno de los más importantes materiales ficticios de la historia y probablemente el material más importante de todos en Minecraft. Utilizado de forma correcta puede dar lugar ha todo tipo de artilugios, incluyendo un disco duro entre ellos. Pero como siempre, la pregunta es: ¿Cómo sería el Redstone en la realidad?

Para empezar el Redstone puede generar su propia electricidad y a la vez actuar como conductor. Debido principalmente a esta última característica y a su color, este material ficticio parece heredar mucho del cobre que podemos encontrar en la vida real. Sin embargo me gusta más la idea de que el Redstone es un material ficticio basado en el grafeno, con un toque de radiactividad de tipo beta.

redston_machine

Este tipo de radiactividad es la que emite electrones, cuyo movimiento es lo que llamamos electricidad. Así pues para que este material ficticio pueda ser real necesitaríamos un buen conductor que además sea radiactivo en el espectro beta, de forma que pueda generar su propia electricidad. De esta forma los interruptores podrían ser no más que una caja de plomo sobre la parte más radiactiva del Redstone.

Y esto es todo por hoy, si tenéis alguna duda sobre cómo funcionaría cada  material ficticio o tenéis algún otro material ficticio que os gustaría saber cómo sería en la vida real, comentadlo y haremos todo lo que podamos para responder correctamente a las peticiones.