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Las técnicas de control mental de las sectas

6 marzo, 2015 20:29

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La gente no se une voluntariamente a una secta, en realidad les reclutan, les engañan. Hoy te mostramos cómo. Conocer los métodos puede ayudarte a no caer en sus redes y además es el conocer estos mismos engaños lo que ayuda a antiguos miembros a comprender la manipulación y poder salir. No dejes que te adoctrinen.

¿A quién eligen?

Las sectas buscan a gente con unas características en particular porque son útiles para su propósito. Pueden buscar gente joven e inteligente que pueda llevar a cabo tareas, o tal vez familias, en ocasiones gente mayor o anciana con dinero. Cada secta tiene su sistema.

No existe un tipo de personalidad ideal para ser captado por una secta pero sí se conocen variables que te hacen más vulnerable: Ser dependiente, poco asertivo, no tolerar la incertidumbre o la ambigüedad (estas personalidades buscan que se les den respuestas), ser idealista o buscar significado espiritual, baja habilidad para juzgar o ser crítico con la información. La cuestión es que todos podemos sentirnos o ser así en algún momento de nuestras vidas, las sectas saben aprovechar los momentos de debilidad y utilizar esa flaqueza momentánea para acceder a ti. Buscan a gente que se siente atraída por la autoridad, con altos deseos de pertenencia, que se sienten solos o tienen dificultades para relacionarse, gente religiosa o a la que le atrae lo sobrenatural. Cuanto más joven es la persona más fácil es reclutarla, también cuando la persona está en una situación personal complicada o de riesgo es más susceptible.

Cada secta tiene su “manual” sobre a quién reclutar y cómo. Muchas se interesan por gente con dinero a la que engañar para hacer cursos o similar.

¿Cómo reclutan a alguien?

Pues os va a resultar sorprendente pero ¡el 60% de sujetos son reclutados por un amigo o familiar! Otros métodos son en ferias, universidades, peluquerías, anuncios en el periódico, etc…

El primer contacto será una forma de obtener información de ti, para luego mimetizar tus gustos e intereses, haciendo así parecer que tenéis cosas en común, así te acabas identificando con la persona que quiere reclutarte.

Luego, con esa información te ofrecen una oferta que no puedes rechazar. Será algo que estés buscando. Puede ser un seminario, una charla sobre un tema que te interesa, un café o ir a cenar. Las mentiras son la base de todo el proceso, puede que el seminario ni siquiera esté muy relacionado con lo que buscabas pero como te cae bien la persona vas. Estos reclutadores conocen muy bien las técnicas de reciprocidad (nos han invitado a un café y le debemos algo), consistencia (si hemos dicho que nos gusta algo mucho es inconsistente rechazar una invitación de ello) y compromiso (la oportunidad que nos ofrece es única y con un descuento que solo es efectivo ahora, empujando a que nos comprometamos).

Siempre te será difícil irte (porque te han traído, no tienes transporte, o porque te hacen firmar un compromiso), el entorno será constante, no estarás solo/a ni un momento durante todo el día.

En ocasiones y dado que lo que realmente representa la secta no tiene nada que ver con lo que venden al sujeto, las sectas crean pequeños grupos (de cara al público) dedicados a los miembros iniciales y su reclutamiento. Pueden ser grupos de pilates, grupos políticos, etc… En estos grupos se engaña la “amistad” del sujeto, le conocen mejor y empiezan a manipularle.

Muchos realizan labores sociales o educativas o realizan actos que todo el mundo considera “buenos” con soporte de alguna entidad religiosa.

Los reclutadores no utilizan ni el acoso ni intentar convence con argumentos ni nada por el estilo. Al contrario son buenos y suaves conversadores, encantadores y aduladores, tentadores, cercanos. Pero al combinarse esto con técnicas de control mental (su verdadera arma) se crea una unión y un compromiso mucho mayor que el que crea cualquier otra relación normal.

La estrategia de la secta va a ser eliminar tu capacidad de razonar y adormecer tu mente para que al final estés dispuesto a ejecutar órdenes y sacrificarte por el grupo. Te alienan y te despersonalizan. En las sectas el fin siempre justifica los medios.

Así pues podemos considerar que hay tres “etapas”:

  • La etapa de “enamoramiento”: La secta lanza su gancho, se introduce gente y un ambiente agradable. Además se inicia el proceso de lavado cerebral pero sin requerirle a la persona ningún tipo de decisión o compromiso radical.
  • Una vez el sujeto se ha identificado con los objetivos del grupo se le plantea un dilema o crisis personal, se le convence de que tiene una vocación o una llamada divina para dedicarse a los objetivos del grupo.
  • Se destapa el pastel: Una vez comprometido con el grupo el sujeto es informado de que para llevar a cabo su “labor” deberá formarse o entrenarse. Aquí entran en juego las técnicas más puras de lavado cerebral.

Las técnicas de adormecimiento:

  1. Adormecimiento mental: El líder y el grupo son lo más importante, se penaliza cuestionar o desobedecer los ideales. Te convencen de que emocional e intelectualmente estás limitado y por lo tanto no debes confiar en tu capacidad de razonar y tomar decisiones.  Se debe asistir a todas las actividades. Se debe pedir permiso para hacer ciertas cosas (incluso por ejemplo para leer ciertos libros o ir a ciertos lugares). Si hay malestar o preocupación se suelen proporcionar rezos, cantos, frases o palabras a repetir para conseguir la “tranquilidad” y que refuerzan los ideales del grupo. El grupo revisa lo que la persona hace y dice. Abandonar el grupo es exponerse a la infelicidad.
  2. Adormecimiento social: El tiempo se dedica en exclusiva al grupo, se deben abandonar metas y objetivos personales no relacionados. El grupo intenta eliminar grupos de referencia anteriores (padres y amigos dejan de ser tan importantes), se revisa el correo del reclutado, se exige convivencia con el grupo. El reclutado debe hacer lo mismo y reclutar a otros.
  3. Adormecimiento corporal: Ayunar, bañarse con agua fría, dormir en sitios incómodos, madrugar, etc… Además se debe entregar parte o todo el dinero a la secta y solo utilizar el dinero y las cosas que el grupo le ofrezca.

Técnicas de control mental:

  1. Engaño: Necesitan mentirte para que te unas. Si evitan contestar preguntas y no son honestos o abiertos sobre el grupo y sus actividades puede que sea porque algo esconden. Suelen ensayar que decir a la gente nueva e ir descubriendo sus ideales reales de uno a uno y de forma gradual para que no te des cuenta del cambio.
  2. Exclusividad: Las creencias no bastan, además de creer en su sistema debes pertenecer a el. Las sectas no permiten que los miembros cambien de grupo o retiren su pertenencia. Uno está en ese grupo y en ninguno más. Te hacen creer que para la “salvación” debes pertenecer y que nadie más puede “salvarte”.
  3. Miedo, culpa e intimidación: Estas son sus herramientas. Si algo va mal será tu culpa por “no creer” lo suficiente, por falta de compromiso o similar, siempre te equivocas y siempre debes esforzarte más. Para todo esto utilizan técnicas de anulación del carácter en las que se utilizan falsos razonamientos (por no tener reales) o lo que es lo mismo con la falacia “ad hominem”  que básicamente viene a ser atacar el carácter de la otra persona como argumento (o en sustitución de uno). También utilizan las sesiones de desarme, en estas 2 o 3 sujetos (y el líder) atacan al nuevo miembro durante horas hasta que este se derrumba (o se pone a llorar). Esto aumenta el miedo a desobedecer o estar en desacuerdo y anula a la persona.
  4. Control de la información: Cualquier información externa al grupo será considerada errónea, falsa o mala. Se entrena a los miembros para destruir cualquier información externa al grupo y se les penaliza si se les encuentra con ella.
  5. Lenguaje cargado: Se utilizan un lenguaje y términos propios, para crear más sensación de pertenencia y aislar más del exterior. Las ideas complejas se condensan en frases simples. Además se repetirán las ideas una y otra vez. Todo estará cargado de significado.
  6. Bombardeo de amor (amor condicional): Al principio te “prepararán” amistades inmediatas, serán muy amorosos y cercanos, apoyándote. Pero todo eso lo perderás si no sigues las directrices. El amor sirve para controlar y crear miedo a perderlo. Ves alerta con los “amigos instantáneos”, el amor verdadero tarda tiempo en surgir, ese amor que ofrecen no es real.
  7. Sustitución de la personalidad: La secta poco a poco reemplaza todo lo que no le gustaba de ti y te amolda para encajar en su sistema.
  8. Control de las relaciones: Te alejarán de los amigos y la familia para que no te influencien. Te dirán a quién puedes o no puedes ver.
  9. Estructura de información: Muchas veces la información confidencial es compartida con el líder (haciendo a los miembros creer que tiene “poderes” cuando en realidad es más bien espionaje), además se entrena a los miembros para vigilar a los “miembros más débiles”. Se obliga a comunicar todo lo que se sabe. Las relaciones privilegiadas entre miembros suelen separarse, la única relación significativa debe ser con el líder. Todos creen estar decepcionando al líder y que el resto de miembros del culto son mejores, pero esto es porque todos ocultan sus verdaderos sentimientos y dejan solo ver esa fachada de falsa felicidad.
  10. Aislamiento: Los “antiguos miembros” o desertores son rechazados, evitados y aislados. Se les evita activamente. Este miedo al aislamiento es un método más de control.
  11. Parada de pensamientos: Se entrena a los miembros a detener un pensamiento o cadena de pensamientos al oír una sola palabra. Algunos ejemplos son cantar para bloquear pensamientos impuros o identificar palabras amenazantes de sujetos ajenos al grupo (por ejemplo “secta”, lavado de cerebro”, etc…) y utilizarlos para cambiar el enfoque hacía una completa desatención o bloqueo de lo que se les dice. Se enseña al sujeto que el mundo exterior está en contra de ellos, que las personas que acusan al grupo de secta son peligrosas y corrompidas, etc…
  12. Control del tiempo: El grupo implica tantas reuniones y actividades que el sujeto no tiene tiempo ni energía para nada más.

Las sectas son muy peligrosas, las habrá que solo quieran tu dinero pero otras promueven crímenes como violaciones entre los miembros, incesto, suicidios colectivos o practicas peligrosas para la integridad de la persona. Recuerda que los miembros han sido manipulados pero el líder no. El líder disfruta de su poder y es perfectamente consciente de lo que hace, disfruta anulando y causando malestar al resto. Si te suenan estos comportamientos y crees que tu o algún conocido puede estar en una secta busca ayuda sin dudarlo.

Fuente: Decision Maquing Confidence, Cult Watch, Cults,

Imagen: Flickr,