Suena a chiste, pero no lo es. EEUU está dispuesta a ofrecer a los ciudadanos europeos la misma protección de su privacidad que tienen los estadounidenses. Las declaraciones de Eric Holder, fiscal general del estado, llegan después de mas de un año de tensión entre las relaciones de los países europeos y EEUU por el espionaje de ciudadanos europeos por parte de la NSA. Esta promesa pretende calmar el clima, al igual que las últimas medidas del gabinete Obama contra la recolección masiva de datos del FBI.

Promesa en un clima tenso

Desde que se liberaron los primeros documentos secretos de la NSA hay un detalle que se ha repetido en todos ellos. Mientras que la agencia tenía que evitar poner como objetivo de sus pesquisas a ciudadanos estadounidenses, tenía vía libre con los extranjeros, sin importar si pertenecían a naciones “aliadas”. Desde entonces se han publicado mas detalles, como que los líderes de la UE fueron blanco de este espionaje.

Hoy, en una reunión en Atenas entre los ministros de Justicia e Interior de la UE y el fiscal general de los EEUU, este último les ha prometido que se mandará al Congreso una nueva legislación que extenderá la ley de privacidad de los EEUU a ciudadanos de la Unión Europea. Esta ley entre otras cosas prohíbe la publicación de datos personales sin consentimiento, y la obligación de permitir el acceso y rectificación de esos datos.

En ese sentido se parece a la ley de protección de datos que ya disfrutamos los ciudadanos europeos, aunque si se materializa esta ley las empresas estadounidenses también estarían obligadas a respetar nuestros datos. Sin embargo comparada con nuestra ley se trata de un texto sin tantas garantías, y relativamente suave con las empresas; desde luego es mejor que nada, pero entre los asistentes a la reunión ya hay voces que piden a los EEUU “hechos, no palabras”, sobre todo teniendo en cuenta que no se habló en absoluto de la NSA.

Fuente | The Guardian