
The Wall de Samsung en el ISE 2025 Omicrono Barcelona
He visto las pantallas del futuro: gigantes, transparentes, modulares, holográficas y hasta basadas en tinta electrónica
Visitamos la feria ISE 2025 en Barcelona, que compañías como Samsung aprovechan para presentar nuevos productos para empresas y educación.
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Todo es a lo grande en el ISE, una de las ferias del sector audiovisual más importantes del mundo, que desde hace tres años se celebra en España. La Fira de Barcelona acogió la semana pasada a 1.600 expositores, en un evento en el que las empresas muestran sus novedades y profesionales de todo el mundo tienen a su alcance las tecnologías que marcarán el camino en los próximos años. Pero lo que más hay en esta superficie de 92.000 metros cuadrados son pantallas, por todas partes, de todos los tamaños y formas imaginables: con forma de cortina, redondas, transparentes y hasta holográficas.
Empezábamos hablando de tamaño y, en ese sentido, el stand de Samsung en el ISE ha sido uno de los más llamativos de toda la feria. Año tras año superan todas las expectativas con The Wall, su solución modular para grandes superficies que en este caso llega a las 496 pulgadas, con resolución 9K y un formato que, gracias a un ángulo en el centro, consigue un asombroso efecto tridimensional. Y éste es sólo el aperitivo de lo que descubrimos una vez entramos en el stand.
"Es una muestra de nuestros productos más representativos del presente, como The Wall o el e-paper, que consigue una eficiencia energética inédita hasta la fecha", explica Jesús Guardiola, ingeniero preventa en Samsung España, a EL ESPAÑOL-Omicrono. "Pero también queremos abrir una ventana al futuro, con productos como el MicroLED transparente o el holográfico, que pueden darnos esa diferenciación frente a la competencia".
Transparentes y holográficas
Es imposible adivinar el porvenir, salvo que seas Isaac Asimov, Nostradamus o Rappel, pero todo parece indicar que las pantallas transparentes estarán pronto entre nosotros, como un elemento tan llamativo como útil en diferentes escenarios. Más aún cuando comprobamos cómo el Transparent MicroLED que pudimos ver en ISE 2024 ha evolucionado, y las imágenes son más nítidas desde todos los ángulos.
Los casos de uso también han aumentado. La anterior versión, además de coloridas imágenes de peces en el fondo marino o unos fuegos artificiales sobre el skyline de una ciudad, apostaba por su utilidad en los palcos de un estadio de fútbol, con el campo en el fondo y las alineaciones, estadísticas y detalles del partido en la pantalla, en una especie de realidad aumentada.
Vídeo | Las pantallas del futuro en la feria ISE de Barcelona
"De momento parece un producto de nicho, habrá que encontrarle la utilidad", reconoce Guardiola. En el stand hay dos propuestas claras: salas de control de tráfico o de ciberseguridad, por ejemplo, donde poder ver más elementos gracias a la transparencia, "pero también en las tiendas, donde puedes darle ese plus estético a una sala o una zona concreta".
La pantalla es delgadísima, de apenas 1 cm, y no tiene bordes, por lo que a cierta distancia la imagen puede parecer un holograma. Para conseguir ese efecto al 100%, la compañía coreana ha ideado otra solución: las pantallas holográficas, con una imagen más definida y con menos sombras que anteriores intentos de llevar lo que parecía propio de la ciencia ficción a la realidad. Para conseguir ese efecto se necesita una pantalla emisora, una compleja capa de lentes y un cristal, encargados de que objetos o mensajes cobren vida ante nuestros atónitos ojos.

Las pantallas Transparent MicroLED de Samsung pueden ser muy útiles en salas de control Omicrono Barcelona
En el stand se recrea el paso por las pantallas de un drive-thru de una cadena de comida rápida y, llegado a un punto y desde un determinado ángulo, los ingredientes de uno de los menús parecen flotar en medio de la nada. El otro ejemplo tiene que ver con los museos, donde tanto las pantallas transparentes como las holográficas pueden encontrar nuevas utilidades como "ver los volúmenes de una pieza volando en el aire", con el ejemplo de un huevo de Fabergé, o aportar información extra de un jarrón encerrado en una urna.
En cualquier caso, es pronto para conocer al detalle todo el potencial de estas tecnologías llamadas a marcar el futuro. "Se lo estamos enseñando a nuestros partners para recorrer el camino juntos, para ver qué podemos hacer con esta tecnología en interior, en exterior, más brillante, más grande… Aún estamos definiendo el producto", explica el ingeniero de Samsung.
Tinta electrónica, del e-book a la calle
Más allá de hologramas y transparencias, el 'bombazo' de la compañía surcoreana este año tiene que ver con la llegada de una tecnología muy esperada, sobre todo para los comercios que utilizan papel o pantallas para anunciar y promocionar sus productos. Se trata del Samsung Color E-Paper, que lleva la tecnología de los libros electrónicos a color a pantallas de gran tamaño y es mucho más eficiente energéticamente que la de las pantallas OLED o MiniLED. "No es una pantalla, no es papel, es otra cosa", resume Guardiola.
Estas nuevas pantallas de e-paper, con el modelo EMDX a la cabeza y entre las 13 y las 75 pulgadas, unen una alta legibilidad a su bajo consumo, y aspiran a convertirse en el estándar de la señalización y la publicidad digital. Su tecnología permite actualizar carteles publicitarios en tiempo real o programar los cambios de manera cómoda e intuitiva a través de una app. Sin embargo, según apuntan los responsables de Samsung, su mayor ventaja es la capacidad para mostrar información estática (no admite vídeos) durante largos períodos de tiempo con un consumo 0 de energía.

Ejemplos de uso de las pantallas e-paper de Samsung Omicrono Barcelona
Samsung no es la única que está enseñando las posibilidades del e-paper en ISE, pero sí están convencidos de que sus propuestas son las más ligeras y delgadas, a pesar de incluir una batería de 5.000 mAh. La pantalla de 32 pulgadas, por ejemplo, tiene un grosor de 17,9 mm y pesa sólo 2,7 kg, lo que permite colgarla y transportarla fácilmente.
Cada carga de la batería permite hasta 200 cambios de contenido y, una vez fijado, el consumo es 0,0 W. Los cambios pueden hacerse a través de la app del móvil, el software VXT de la propia Samsung o una memoria USB. Una vez cargada la nueva imagen, un algoritmo específico de mejora de imágenes se encarga de perfeccionar el resultado. La sensación es la de estar viendo un papel satinado, con mucho brillo y una gran definición, aunque si te acercas sí puedes ver los puntos de tinta más claramente. En cuanto a los colores, basándose en 6 tonos primarios estas pantallas pueden ofrecer hasta 65 millones de colores.

Omicrono
Su cliente potencial más evidente son pymes del sector de la restauración, por ejemplo, pero las posibilidades son enormes, también para la publicidad en las paradas de autobús, por ejemplo. "El e-paper va a aparecer en sitios donde había papel y no lo cambiaban frecuentemente; gracias a esta tecnología van a poder hacer más cambios y los costes para los clientes van a ser mucho menores. El papel es mucho más barato, pero la operativa es mucho más cara, porque implica el desplazamiento de una persona y genera muchos más residuos. La pantalla e-paper tiene una vida larguísima y tiene mucha más utilidad".
El tamaño sí importa
Durante años, el tamaño de las pantallas estuvo limitado por la tecnología. A falta de proyector, las 32 pulgadas nos parecían lo máximo para disfrutar del cine en casa. Sin embargo, los nuevos paneles LED, OLED y MicroLED han desbloqueado esos límites y Samsung quiere llevarlo un paso más allá con The Wall.

The Wall con resolución 9K y 496 pulgadas Omicrono Barcelona
Estas gigantescas pantallas no tienen límites de tamaño, forma o estructura. Sus módulos básicos o cabinets, de 800 x 400 mm, pueden configurarse a gusto del cliente para obtener pantallas enormes que se ajusten al espacio que deben cubrir. "Vendemos kits en tamaños específicos, de 110, 130 y 146 pulgadas, pero son sólo tres referencias", señala Guardiola. "Lo habitual es construirlo de manera modular, con tantos cabinets como hagan falta. Ya no hablamos tanto de pulgadas, sino de metros, pero también si lo quieres en horizontal, en vertical, haciendo esquina…". Las posibilidades son infinitas.
Y por si el tamaño fuera poco, en Samsung han decidido darle un plus integrando otros elementos para que la experiencia sea verdaderamente sorprendente. "Queremos ir más allá del audiovisual. Si le añades otras cosas, enriqueces las sensaciones de quienes la observan. Hablo de efectos de iluminación, de humo, de vapor… todo eso sirve para ampliar la utilidad de la pantalla".
El ajuste micrométrico de los enganches permite que todo parezca una única pantalla y no hay ni rastro de los lugares donde se juntan los módulos. En concreto, la que hemos podido ver en ISE tiene un pixel pitch de 0.8 (la distancia medida en milímetros entre los centros de los pixeles de una pantalla). El resultado es una resolución 9K para ofrecer imágenes tan brillantes y negros tan oscuros que no puedes hacer otra cosa más que quedarte embelesado viendo las animaciones en bucle.