Los nuevos MacBook Pro han dado de qué hablar en estos días, después de muchos rumores y filtraciones. Apple por fin ha renovado su gama profesional de portátiles, y lo ha hecho con detalles acertados, como la introducción de Touch ID o la pantalla OLED auxiliar. Ayer os contamos todo lo que debéis saber; tenéis el enlace justo debajo.

Sin embargo, y por desgracia, el nuevo MacBook Pro también nos trae cosas no tan buenas. Detalles que no gustarán a muchos, sorpresas que podríamos clasificar de desagradables. Y en Omicrono, al igual que os contamos el lanzamiento de los nuevos MacBook Pro, también os contamos las sombras del nuevo portátil de Apple.

Adiós para siempre, manzana retroiluminada…

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Vuestros ojos no os engañan: Apple ha prescindido por completo de la manzana retroiluminada. Antes, la manzana se trataba de un cristal que se iluminaba con la luz residual de la pantalla. Ahora adopta las líneas del resto de dispositivos de Apple, es un detalle oscuro invariable.

No se trata de algo nuevo, es un detalle que pudimos ver por primera vez en el nuevo MacBook. Y es muy posible que tenga una razón técnica detrás, como conseguir un diseño más resistente, o poder hacer la pantalla más fina y ligera.

Pero la desaparición de la manzana retroiluminada es eliminar una de las señas de identidad de Apple. Todos reconocemos esa manzana que se ilumina cuando está encendido, y aunque Apple no va a perder el reconocimiento que tienen sus portátiles con este detalle, sí es una pena que desaparezca sin hacer ruido.

…y el MagSafe también pasa a mejor vida

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Y hablando de señas diferenciadoras, otra de las señas de los MacBook es (o más bien era) el cargador MagSafe. Para los que no lo conozcáis, el MagSafe es un sistema de carga magnético. MagSafe es el responsable de que el portátil no se caiga de la mesa si pegamos un tirón al cargador: el cable se desengancha sin peligro. También es una solución inteligente para evitar el desgaste del conector del cargador, ya que son pins de carga.

Apple, también a partir del nuevo MacBook, ha pasado del MagSafe al USB-C para las funciones de carga. El cargar a través del USB tipo C es un estándar, nos puede ahorrar trabajo de cara al futuro, pero la desaparición del MagSafe son malas noticias. Además de no poder usar los cargadores que ya teníamos, hemos perdido de un plumazo todas las ventajas del sistema MagSafe.

Ah, y encima Apple ha decidido no incluir el cable extensor para el cargador. Si lo quieres, ahora te lo tienes que comprar por separado. Toma ya.

DDR3 y Skylake: ¿el MacBook Pro nace desfasado?

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Por una parte, el tema de la memoria RAM ha causado controversia. Apple ha decidido, con los nuevos MacBook Pro, permanecer en el estándar DDR3. Es cierto que se sigue usando sin más problemas, pero DDR4, su evolución, lleva mucho tiempo entre nosotros. Y cobrar lo que cobra Apple por un portátil e incluir tecnología “desfasada” es de caraduras.

Hablando de tecnología desfasada, Apple ha escogido los Skylake de Intel como procesadores. Y tampoco tiene nada de malo, Skylake ha demostrado que es rendimiento asegurado. Pero existe otra una nueva generación, los Kaby Lake, que podrían haber preparado a este MacBook Pro de cara al futuro.

Puede que Intel no haya podido proporcionar los Kaby Lake a tiempo y que Skylake sea ir sobre seguro para Apple, pero es una pena que los nuevos MacBook Pro no lo lleven. De esta forma, estarían más a prueba del futuro. Y qué diablos, Apple cobra su buen dinero por estos portátiles, qué menos que el que lleven lo último de lo último.

Tener los nuevos MacBook Pro ahora es 400€ más caro

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Porque no olvidemos que Apple cobra, y bien cobrados, estos nuevos portátiles. Los precios base, sin incluir las mejoras que podemos seleccionar (y que suman al precio), son las siguientes:

• 13 pulgadas
  • Sin ‘Touch Bar’, 2GHz y 256GB | 1.699€
  • Con ‘Touch Bar’, 2.9GHz y 256GB | 1.999€
  • Con ‘Touch Bar’, 2.9GHz y 512GB | 2.199€
• 15 pulgadas
  • Con ‘Touch Bar’, 2.6GHz y 256GB | 2.699€
  • Con ‘Touch Bar’, 2.7GHz y 512GB | 3.199€

Respecto a la anterior generación de Mac, los precios han subido la friolera de 400€. El (ahora) antiguo MacBook Pro Retina de 13 pulgadas con 128GB de memoria estaba en en 1.299€. Ahora es 400€ más caro acceder a un MacBook Pro, aun sin tener mejoras como Touch Bar o Touch ID (que son 300€ más).

Y prepárate para la fiesta de adaptadores

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El puerto HDMI, los Thunderbolt 2 (con puerto DisplayPort), el lector de tarjetas SD, y los dos puertos USB tipo A. El único que ha sobrevivido (irónicamente) a la purga es el jack de 3.5 milímetros; el resto han sido sustituidos por USB de tipo C. Y esto tenemos que cogerlo con pinzas, porque el USB de tipo C es el futuro. Ya existen muchos cables y dispositivos que lo utilizan, así que no tenemos excusa.

Bueno, sí que la tenemos: la realidad es que el USB de tipo C esta entre poco y nada extendido. Quien se compre un MacBook Pro va a necesitar una auténtica retahíla de adaptadores si quiere usar lo que ya tiene. O comprar cosas nuevas con USB-C, también es otra opción. Y esto, como ya os hemos contado en otro artículo, va a traer unos cuantos problemas.