Macron da un portazo a las reivindicaciones nacionalistas de Córcega

Emmanuel Macron ha optado por atar en corto las reivindicaciones de los nacionalistas de Córcega en pleno pulso independentista de la isla mediterránea, donde los partidos regionalistas y nacionalistas acumulan más protagonismo que nunca y han aprovechado el procés en Cataluña para relanzar sus demandas.

El presidente francés sólo contempla añadir una mención a la singularidad de Córcega en una futura reforma constitucional. Un gesto simbólico que no vendrá acompañado de ninguna concesión, ni un ápice de autogobierno. 

Esta mención en la Carta magna gala será discutida en un proceso de diálogo que abrirá Macron para mostrar su "flexibilidad". Se tratará de una modificación del artículo 72 y se abordará esta primavera, según precisa el diario Le Monde.

El presidente galo ha aprovechado su visita de dos días a la isla para seducir con firmeza a los nacionalistas y regionalistas corsos para que opten por la unidad: "Córcega debe tomar una decisión: mantener con la República un cara a cara que ha sido ruinoso y estéril, o mirar hacia el futuro y valorar que ser parte de la quinta potencia mundial es un activo". 

Siguiendo el guión previsto, el mandatario francés ha subrayado que no otorgorá el estatus de cooficialidad al corso ni negociará una amnistía de los "presos políticos" -en la terminología del nacionalismo-. Estas eran los dos principales reivindicaciones del movimiento. 

"Las instituciones pueden y deben evolucionar, pero no son los únicos impulsores del cambio", ha reflexionado Macron durante una alocución solemne en la que estaba flanqueado por las banderas de Francia y la Unión Europea.