La actual gama de Jaguar no ofrece ninguna carrocería familiar, que desapareció con la llegada de la segunda generación del XF, que anteriormente sí contaba con una variante ranchera, convirtiéndose en el segunda Jaguar de la historia con ese tipo de carrocería tras el X Type Wagon de principios de siglo. 

Sin embargo, con la llegada de la segunda generación de la berlina media del fabricante inglés desapareció de nuevo la carrocería familiar. Aparentemente, y según una serie de rumores que corrían como la pólvora a través de la red, el XF no volvería a tener una carrocería de este tipo, algo que ahora ha quedado desmentido tras la confirmación oficial por parte de la marca de la llegada, en 2017, de una nueva generación del XF Sportbrake. 

Es evidente que la llegada de esta carrocería ya no va a sorprender a nadie dentro de la marca, ni siquiera a los más puristas, que tras el lanzamiento de modelos como el F-Pace, han visto como Jaguar ha decidido modernizar su oferta para no quedarse atrás frente a una competencia cada vez más preparada. 

Con esta variante podrá volver a competir con garantías contra un trío alemán en el que las versiones familiares representan buena parte del porcentaje de ventas final, ya no en España, donde este tipo de vehículos no suelen venderse tanto con carrocería familiar, sino en el norte de Europa, donde este tipo de variantes cuentan con una legión de adeptos.