Perspectiva de la Imagen de las torres de Martiricos, a lo lejos, y de la torre de la Iglesia de San Juan, en el Centro de Málaga.

Perspectiva de la Imagen de las torres de Martiricos, a lo lejos, y de la torre de la Iglesia de San Juan, en el Centro de Málaga. Álvaro Cabrera

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Las torres mutantes de Málaga: los gigantes de Martiricos se transforman en dos grandes alojamientos turísticos

De las 450 viviendas que integran las dos edificaciones, ya hay 211 inscritas en el Registro de Turismo de Andalucía. A lo que sumar dos hoteles con 314 habitaciones.

Más información: El negocio 'amenazado' de los pisos turísticos en Málaga: en las torres de Martiricos piden hasta 370 euros

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Las torres residenciales más altas de Andalucía, una de las cuales alcanza los 111 metros, han mutado definitivamente su naturaleza original. Los dos gigantes de acero y hormigón promovidos por AQ Acentor en el barrio malagueño de Martiricos se han convertido en reflejo mayúsculo del modelo de inversión residencial que desde hace unos años empieza a imperar en la capital de la Costa del Sol. Y en el que la vivienda deja de ser destinada a primera residencia para convertirse en un artículo de negocio.

La conclusión es aplastante al observar los datos del Registro de Turismo de Andalucía. De acuerdo con la base de datos autonómica, actualmente hay dados de alta para poder ser explotados como alojamientos turísticos de corta duración 211 pisos en estas edificaciones. 

211 de un total de 450 unidades residenciales. Esto supone casi el 47% del total. En total, son 398 unidades y 942 plazas. Un elemento al que sumar el hecho de que parte de la Torre Norte acoge desde hace algunas semanas dos hoteles con capacidad para 314 habitaciones (el Hampton by Hilton y el Staybridge Suites).

Lo llamativo del caso es que esta explosión, reflejo de lo que viene sucediendo en otros puntos de la ciudad, se localiza en un muy corto periodo de tiempo. La primera vivienda de las torres inscrita con fines turísticos lo hizo el 22 de diciembre de 2023, coincidiendo con el momento exacto en que la promotora empezó la entrega de llaves a los compradores. La última, el pasado 17 de enero.

Desde ese día, la secuencia no ha tenido fin, aunque en los últimos meses es algo más atenuado el registro de inmuebles con fines turísticos. La base de datos de la Junta sigue incluyendo todos estos pisos pese a que la gran mayoría de ellos debería ser dado de baja, dado que incumple la exigencia marcada desde finales de febrero del año pasado por el Ayuntamiento, que dio luz verde a un decreto que obliga a cualquier piso turístico a disponer de un acceso y unos servicios independientes del resto del complejo en el que se encuentren. 

Un extremo que contravienen todos los inmuebles inscritos desde el 23 de febrero en adelante, que es la fecha que se topa como punto de partida por parte de la Gerencia de Urbanismo.

Pese a esta evidencia y a que el Consistorio ya reclamó meses atrás a la Administración regional la baja de todos aquellos pisos turísticos inscritos a partir de esa fecha que incumplan la normativa urbanística, la realidad es que siguen presentes en el registro autonómico, con lo que, potencialmente, pueden seguir ejerciendo su actividad lucrativa.

Una simple consulta en el portal Airbnb permite comprobar que cualquier persona interesada puede arrendar uno de los pisos turísticos de las Torres de Martiricos desde 83 euros la noche. El pico, en una primera comprobación, alcanza los 299 euros la noche. 

"Exclusivo apartamento en la planta 23 de las Torres de Martiricos, con increíbles vistas a la bahía de Málaga, perfecto para familias", dice uno de los anuncios, en el que se precisa la existencia de un gran salón-comedor, terraza, cocina, 2 baños y 3 dormitorios. 

Casi 13.300 viviendas ya registradas

Lo que está sucediendo con las Torres de Martiricos y los pisos destinados a alojamientos turísticos es extensible al conjunto de la capital de la Costa del Sol. Pese a los evidentes esfuerzos asumidos por el Ayuntamiento en el último año con la firme pretensión de poner freno a este boom, la realidad es que sigue sin lograr el objetivo. 

Lejos de frenar, la cifra de referencias que hay en el Registro de Turismo de Andalucía ha aumentado considerablemente. Muestra de ello es que de las 11.117 que había a finales de febrero, cuando entraron en vigor las primeras restricciones municipales, se ha pasado en la actualidad a 13.292. Son 2.175 más, lo que supone un crecimiento del 19,5%.

La última vuelta de tuerca dada por el Consistorio entró en vigor la semana pasada y supone, de facto, la imposibilidad de permitir cualquier nueva vivienda turística en 43 barrios de la ciudad. Sea como fuera, igual que ocurre con la normativa urbanística, la aplicación formal de estos límites está en manos de la Administración regional, que es la que tiene que impedir que los inmuebles sean inscritos. Algo que, como queda patente, no está ocurriendo