Varios vehículos circulando este jueves por la A-5, donde han comenzado los cortes por las obras de soterramiento.

Varios vehículos circulando este jueves por la A-5, donde han comenzado los cortes por las obras de soterramiento. Sara Fernández El Español

Madrid Capital

La ruta en coche al 'punto negro' de Madrid en hora punta: las obras de la A-5 esquivan atascos y el tráfico se traslada a la A-42

EL ESPAÑOL recorre en primera persona la A-5 en la segunda jornada de cortes por la 'megaobra' de Almeida para soterrar la autovía. 

Más información: El otro gran cambio de la A-5 tras el soterramiento: Puente baraja poner un carril bus VAO entre Alcorcón y Leganés

Publicada
Actualizada

Alcorcón, 8:06 horas de la mañana del jueves. Subidos en un coche, un redactor y una fotógrafa de EL ESPAÑOL se proponen comprobar cómo de fácil o difícil es atravesar la A-5 para llegar a la capital. El miércoles, el Ayuntamiento comenzó el grueso de las obras para soterrar más de tres kilómetros del Paseo de Extremadura. Es el proyecto más 'faraónico' de José Luis Martínez-Almeida. Desde esa jornada, un amplio tramo de la carretera funciona con la mitad de carriles.

El inicio del viaje de este periódico arranca en la calle Campo Santo, a pocos metros de una incorporación a la A-5. Alcorcón es el primer municipio que la autovía conecta con Madrid. De madrugada y sin apenas tráfico, se tardan entre 7 y 9 minutos en llegar de un sitio a otro. En la ciudad, la hora punta se alargará desde las 6 a las 10 horas. Por ello, el objetivo es recorrer la A-5 pasadas las 8 horas, en pleno trasiego de conductores en la capital. 

Hace frío y el cielo está despejado. La ruta comienza sin retenciones, con un tráfico fluido en Alcorcón. En menos de cinco minutos, los periodistas alcanzan el primer punto de interés: Cuatro Vientos. El plan de movilidad liderado por el Ayuntamiento impide a los autobuses interurbanos ir más allá. Si antes podían descargar en Príncipe Pío, ahora tienen su cabecera en Cuatro Vientos, donde los viajeros deben coger Metro o Cercanías para acercarse a la capital.

Comprobamos en primera persona el tráfico de la A-5 tras el inicio de las obras de soterramiento Sara Fernández

Los buses verdes se acumulan en un lateral en forma de hilera. Mientras tanto, los vehículos privados circulan sin problemas. El miércoles, en el día D del megaproyecto, la circulación en la A-5 cayó un 26% respecto a las semanas anteriores. Hasta los conductores de autobuses notaron la autovía más descongestionada de lo esperado. La gente se lanzó al transporte público. El patrón acabará repitiéndose el jueves.

En dirección a Madrid, los carriles se reducen a la mitad a partir de la Avenida del Padre Piquer. Aunque las retenciones comienzan a notarse algo antes, a la altura de la calle de Allende. De circular a 70 km/h se baja de golpe a menos de 30 km/h. Los coches se acumulan y los pequeños parones en la carretera se repiten ya desde las proximidades de Piquer. Durán más o menos segundos, pero nunca llegan al minuto en todo el camino en coche. Eso sí, por momentos el paso es muy lento, por debajo de los 10 km/h.

Tráfico lento en la A-5 a la altura de Batán.

Tráfico lento en la A-5 a la altura de Batán. Sara Fernández El Español

La zona estrechada se prolonga desde Piquer hasta la avenida de Portugal. Se suceden ya las vallas de obra, señales luminosas parpadeantes, operarios con maquinaria pesada, alguna excavadora, escombros y conos que limitan los carriles restringidos. La impresión es que, efectivamente, se avanza lento, pero no hay colapso pese a que hay un tramo al límite de su capacidad. 

El delegado del Área de Urbanismo, Movilidad y Medio Ambiente, Borja Carabante, confirmó que el tráfico se había vuelto a reducir en torno a un 25%. "La mayor densidad de tráfico en la hora punta se ha vuelto a registrar de Padre Piquer a Cuatro Vientos, con desplazamientos más fluidos", escribió en su cuenta de X, antes Twitter. El concejal explicó que los madrileños estaban dejando sus vehículos en casa y se habían lanzado de forma "masiva" al transporte público.

Un excavadora a la altura de la Avenida de Portugal.

Un excavadora a la altura de la Avenida de Portugal. Sara Fernández El Español

Además, Cibeles detectó un "incremento del tráfico en las vías aledañas", como la A-42. "Por tanto, la gente ha hecho caso a las recomendaciones en cuanto a los desvíos a utilizar". Alternativas, por cierto, que pueden consultarse de forma detallada en esta guía, donde también se explica el dispositivo desplegado por Cercanías, Metro, EMT y los interurbanos. 

EL ESPAÑOL comenzó su viaje a las 8:06 en Alcorcón y lo terminó sobre las 8:27 horas, ya cerca de los túneles que conectan con la M-30. El Ayuntamiento, en cualquier caso, asume que las obras provocarán "problemas" y "afecciones" y recomienda usar el transporte público.