
Un paciente en consulta médica. Imagen de archivo.
La lista de espera de consultas en la sanidad pública se elevaría un 30,1% si se elimina el modelo Muface, según AIReF
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal ha hecho una simulación de cuál sería el impacto si todos los mutualistas pasasen al SNS.
Más información: La AIReF propone que los nuevos funcionarios se incorporen a la sanidad pública y no a Muface, Mugeju o Isfas
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha presentado este lunes el esperado informe sobre la eficacia y eficiencia del mutualismo administrativo (Muface, Mugeju e Isfas). Una de las propuestas que hace el organismo es que los nuevos funcionarios se incorporen de manera progresiva a la sanidad pública.
A este respecto, la organización que preside Cristina Herrero ha analizado el impacto que tendría la eliminación del modelo Muface. Es decir, ha hecho una simulación del incremento de listas de espera si todos los mutualistas que ahora tienen asistencia sanitaria privada pasasen al Sistema Nacional de Salud (SNS). En consultas, se elevarían un 30,1%. La lista de espera quirúrgica, por su parte, se incrementaría en un 7,2%.
Actualmente, 1,6 millones de mutualistas se decantan por la sanidad privada. La incorporación de este colectivo al Sistema Nacional de Salud supondría, de no reforzarse los servicios, un incremento de las listas de espera de consultas desde los 81,6 hasta los 106,2 pacientes por cada 1.000 habitantes.

Simulación del incremento de las listas de espera.
En el caso de la lista de pacientes que esperan una operación, avanzaría en 1,3 pacientes por cada 1.000 habitantes, pasando de 18,2 a 19,5. La AIReF puntualiza que se trata de una media y que existiría cierta heterogeneidad por comunidades autónomas.
Para estas simulaciones se ha supuesto que la tasa de frecuentación (quirúrgica y de consultas a especialistas) de los mutualistas al incorporarse al Sistema Nacional de Salud sería la del colectivo de la sanidad pública.
El análisis incluye, también, una simulación del impacto que tendría el traslado de los mutualistas de opción privada al SNS en atención primaria. Los resultados indican que cada profesional de medicina de familia realizaría de media 0,9 consultas adicionales al día, de 27,9 a 28,8 (un 3,3 % más).
En este caso, el organismo ha supuesto que la tasa de frecuentación de consultas de medicina de familia de los mutualistas al incorporarse al Sistema Nacional de Salud sería la del colectivo de la sanidad pública para cada grupo de edad, sexo y renta.
Cifras diferentes
Las cifras que aporta la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal en su análisis distan mucho de las que recoge el informe El mutualismo administrativo: Modelo predictivo sobre la elección de los mutualistas y escenarios futuros, realizado en el marco de la Cátedra de Salud Sostenible y Responsable de la Universidad Complutense de Madrid, impulsada junto a Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE).
Según este último texto mencionado, la desaparición del mutualismo administrativo supondría un aumento del 266% de las listas de consultas externas y del 115% para una intervención quirúrgica.
A nivel de infraestructuras, el sistema público necesitaría de casi 4.000 camas adicionales, además de tener que asumir un impacto económico de más de 1.000 millones de euros para la sanidad pública al tener que absorber la asistencia de todos los mutualistas.
También supondría pérdidas para las aseguradoras. De acuerdo con los cálculos que recoge el informe impulsado por ASPE, las compañías de seguros perderían un 14% de su facturación, lo que se traduce en 1.700 millones de euros. Mientras, los prestadores de servicios hospitalarios verían reducidos sus ingresos un 8%, es decir, alrededor de 1.000 millones de euros.