Las bolsas europeas aceleraron este jueves mientras los bancos centrales comienzaban su camino por la senda del tapering. Las decisiones de aumentar tipos o reducir programas de compras anunciadas en las últimas horas impulsaron las bolsas con fuerza. El Ibex 35 subió un 1,27% hasta los 8.380 puntos, incapaz sin embargo una vez más de recuperar la ansiada cota de los 8.400 enteros.

Los inversores se quedaron con la parte del discurso de los bancos centrales en los que se ensalza la solidez de la recuperación económica como motivo principal para su acelerón en el esperado tapering. Mientras que la Fed se decantó ayer por agilizar el ritmo de subidas de tipos y recortar su programa de compras de deuda, el Banco de Inglaterra y el Norges Bank fueron más allá y han incrementado ya sus tasas de referencia.

Por su parte, y según se esperaba, la postura más prudente fue la que ha tomó el Banco Central Europeo (BCE). Aunque rebajó el volumen de compras de su programa ordinario y certificó que el Plan de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP) acabará en marzo del año que viene, prolongó hasta 2024 la reinversión de vencimientos y despejó la posibilidad de subir tipos en 2022.

Con esta premisa, los valores del Ibex 35 se decantaron prácticamente en bloque por las alzas, aunque con un ímpetu dispar. Al frente de la tabla de revalorizaciones del selectivo, Solaria, que se apuntó avances del 7,25% después de haber recibido doble mejora de precio objetivo y consejo.

Mientras que desde RBC marcaron una recomendación de igual a mercado con potencial hasta los 18 euros por acción, en Credit Suisse señalaron que Solaria debe sobreponderarse en cartera. Una tesis que respaldaron elevando su precio objetivo hasta los 21 euros por acción.

La subida de tipos en Reino Unido impulsó la cotización de los dos bancos españoles con más intereses en el mercado británico. El Santander sumó un 4% y el Sabadell se adelantó un 1,2%.

Con avances del 1,46% buscó sacudirse parte de las fuertes pérdidas acumuladas en la víspera Inditex, que ayer cotizó sus cuentas trimestrales. Solo un 0,6% remontó IAG, que certificó la ruptura de su plan original para adquirir Air Europa.

Al otro lado, apenas siete valores cedieron a las pérdidas. Los protagonistas de este comportamiento más rezagado fueron Indra (-1,55%), que volvió a ser penalizada por la retirada parcial de los March de su accionariado, y Meliá Hotels (-1,54%).

Con todo ello, el Ibex 35 volvió a salir derrotado de su enfrentamiento con la resistencia de los 8.400 puntos contra la que lleva semanas luchando con escaso éxito. Y eso que el cierre del miércoles por debajo de los 8.300 enteros no auguraba nada bueno para el selectivo español, que sin embargo desde primera hora encontró enmienda a su rumbo en el enérgico repunte de Wall Street.

Por lo que se refiere a la agenda financiera del día, algunos datos destacados más allá de las reuniones de bancos centrales. Destacaron los índices PMI manufactureros de varias economías europeas, más sólidos de lo previsto en su mayoría, y los datos de permisos de construcción en EEUU, donde compartiron protagonismo con el dato semanal de subsidios al desempleo, menos amable de lo que se vaticinaba.