Ence tiene el triste récord de ser la empresa del Ibex de peor desempeño bursátil durante 2019. La  empresa papelera presidida por Ignacio de Colmenares y Brunet perdió un 32% durante el año pasado hasta los 3,67 euros, la que más cayó de todo el selectivo. Un retroceso que se ha mantenido en los primeros compases del año dejándose otro 7,4% hasta los 3,52 euros con los que cerró el viernes pasado.

La compañía culpa de esta caída de la cotización al "sorprendente" cambio de criterio de la Dirección General de Costas en relación a la prórroga de la concesión de su fábrica de Pontevedra, en un contexto, además, de caída del precio de la celulosa.

Ence e Ignacio de Colmenares  insisten en que están avanzando en la ejecución de su Plan Estratégico 2019-2023, que comprende una mejora de su beneficio bruto de explotación (Ebitda) del negocio de Energía de cerca de 30 millones de euros en 2020, con el objetivo de alcanzar 150 millones de euros en 2023. Del mismo modo, en el área de celulosa, la compañía quiere ampliar un 50% su biofábrica de Navia (Asturias).

No obstante, los mercados siguen sin internalizar estos cambios y siguen penalizándo a la papelera en los mercados. De Colmenares y su equipo no han logrado transmitir de sus previsiones, un problema si es que quieren que su cotización acompañe sus planes de crecimiento.

El futuro de Arcelor Mittal está lleno de interrogantes. La compañía acerera ha sido una de las más perjudicadas por la guerra comercial que libran Estados Unidos y China, lo que ha impactado de lleno en sus cuentas y en su negocio en España. Arcelor Mittal ya anunció que reduciría temporalmente su producción de acero en Europa en tres millones de toneladas en términos anualizados, lo que incluye un descenso de 700.000 toneladas en sus plantas de Asturias.

Esto ha llevado a su presidente en España, José Manuel Arias, a replantearse toda su actividad. Lo más reciente es el anunciado repliegue en País Vasco con el cierre de la planta de Agurain. La dirección comunicó a los quince empleados que la actividad se extinguirá el primer trimestre de 2020.

Por otro lado, han decidido proceder al arranque de parte de la producción de Gijón, aunque comunicaron que mantendrá el actual Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). De es manera, se mantiene la incertidumbre respecto de la producción de la compañía en nuestro país en un contexto internacional que parece que no va a mejorar.