David Soto, director general y futuro presidente de Kyndryl para España y Portugal.

David Soto, director general y futuro presidente de Kyndryl para España y Portugal.

Tecnológicas

David Soto (Kyndryl): "Nuestro activo son las personas. No tenemos producto, sino talento"

El nuevo director general y futuro presidente de Kyndryl para España y Portugal anuncia la creación de un grupo especializado para asesorar a las empresas.

27 octubre, 2022 07:33
Madrid

El pasado 1 de octubre David Soto fue fichado como director general para España y Portugal de Kyndryl. Procede de la empresa madre, IBM, de la que se desgajó como "compañía independiente", en noviembre hará un año, convertida en una startup con 90.000 empleados y grandes clientes en todo el mundo.

Y como "el movimiento se demuestra andando", Soto cambiará otra vez de empleo el próximo 1 de enero, convirtiéndose en presidente del ámbito hispano portugués de la consultora.

Encima, la ocasión de presentarse a los medios se transforma en el anuncio de una nueva estructura de trabajo de la compañía.

Se trata de crear una nueva división, departamento o "unidad de negocio" con tres patas, para ofrecer asesoramiento rigurosamente especializado a cada uno de sus clientes. Las dos primeras patas, bautizadas como Vital y Bridge, ya habían sido dadas a conocer. La tercera, Consult, es rigurosa novedad.

"Es un anuncio que se produjo ayer en Estados Unidos", señala Soto, aclarando que la cita con la prensa ha resultado una coincidencia, porque sabían que el anuncio era inminente, pero ignoraban cuándo ocurriría.

Tres etapas

En algunos momentos Soto menciona las novedades como "tres divisiones", aunque el objetivo de esa estructura lo explica como tres etapas diferenciadas en la tarea de asesoramiento.

"Vital es un espacio -físico- de cocreación, en el que nuestros expertos se sientan con el cliente para entender el negocio de la compañía y ayudar a escalar y acelerar su modernización e inyectar la tecnología más adecuada. Y, desde nuestra independencia [del antiguo tronco IBM], recomendar las alianzas más convenientes, con metodología agile", detalla Soto.

El futuro presidente subraya, en cuanto a la independencia, que tienen acuerdos para trabajar "con todas las hiperescalares". Es decir, básicamente con las tres grandes, Amazon, Azure y Google, además de IBM, su competidora en la nube, que es el espacio natural para la digitalización en el que opera Kyndryl.

David Soto, director general y futuro presidente de Kyndryl para España y Portugal.

David Soto, director general y futuro presidente de Kyndryl para España y Portugal. JULIO MIRAVALLS

Bridge lo define como una "plataforma abierta IPAS (integrated platform as a service), para poner las herramientas y alianzas a disposición de los clientes, como servicio para consumo a través de APIs". Algo parecido a un Marketplace, al que tienen acceso los clientes y las compañías aliadas.

Y, por fin, la novedad del día, Consult, es un área de asesoramiento para "aconsejar y acompañar la implementación y operación de las innovaciones tecnológicas".

Kyndryl dedicará 10.000 de sus 90.000 empleados en todo el mundo a atender esa nueva forma de trabajo. El resto se ocupará de continuar con la operativa del día a día.

Los 300 de España

En España serán 300, de los aproximadamente 5.000 empleados que tiene, los que se dediquen a esa actividad de asesoramiento especializada, en sus variantes Consult y Bridge indistintamente.

Soto reivindica que todos sus trabajadores son grandes expertos operando los sistemas de datos y de cloud, especialmente en lo referido a cargas de misión crítica, y considera que la especialización debe considerarse una "inversión en talento".

"Nuestro activo son las personas, no tenemos producto. No tenemos hardware ni software, sino talento", asevera Soto.

Está convencido de que "aquellos que se enfoquen en las personas de talento van a capitalizar las necesidades de sus clientes y van a mejorar sus líneas de facturación y rentabilidad".  

Soto añade que la creación de esa nueva forma de organizar la actividad no significa, por ahora, abrir una campaña de busca y captura de nuevos talentos, más allá de lo que pueda imponer un cierto movimiento de continua renovación.

Admite que en el mercado "hay más proyectos que gente para abordarlos". Pero aclara que, si "las compañías de servicio deben estar por encima del 20% de rotación", la suya está por debajo del 10%, lo que considera un indicador fáctico de que "la gente está implicada con el proyecto".

Lucha feroz por el talento

En cuanto a "la lucha feroz por el talento", en la que el mundo de la tecnología "es muy específico", entiende que ha habido "dos o tres revoluciones tecnológicas y ahora estamos en una de ellas. Estuvimos en la de internet, estuvimos cuando se automatizaron los cores de las grandes compañías, y son momentos que duran cuatro o cinco años, donde el talento es de verdad la clave".

Afirma que trabajan "en cómo acelerar la entrada de personal cualificado desde las universidades, para hacer que la adopción de las nuevas tecnologías sea más rápida".

Preguntado por D+I sobre la cualificación de los nuevos titulados universitarios, y el tiempo que requieren para funcionar en su empresa, Soto describe una actuación que denomina "eme menos dos": "Estamos trabajando con las universidades desde dos años antes de que terminen sus estudios, para formarlos antes de que salgan al mercado laboral".

Habla de "los nuevos modelos de contratos", que pueden permitirles a los estudiantes hacer prácticas. También plantea fórmulas para "ayudarles a financiar sus estudios", para que "entren al mercado laboral más rápido, más preparados y más enfocados a lo que las empresas queremos". Y, además, con cierto grado lealtad a la compañía que les ayudó, entiende.

Y en la medida en que, a punto de cumplir un año de existencia, a su compañía le toca hacer balances, Soto enfatiza que "ahora el mercado es más grande, al haber abierto nuestro ecosistema a otras alianzas", en comparación con la actividad anterior, en el seno de IBM.

Ganadores y perdedores

Habla en números redondos para señalar que "para principios de 2023" habrán generado "una cartera de nuevos contratos por 1.000 millones de dólares" de manera que prevé "un recurrente de 1.000 millones de más facturación en los años 24 y 25".

En cuanto a la coyuntura actual, "difícil por los cambios geopolíticos y la inflación", admite que "el momento económico complicado por la guerra de Ucrania ha hecho que estemos todos más apretados".

Pero Soto mira al futuro de su propia actividad con relativo optimismo: "La tecnología sigue su rumbo y la disrupción va a ser una palanca para que, como en todas las crisis, haya vencedores y vencidos, ganadores y perdedores. La tecnología va a ser una palanca para navegar mejor la crisis y para diferenciarse de los competidores".

"No preveo que vaya a haber un descenso en el gasto en tecnología de nuestros clientes", añade. "Seguro que va a haber que apretarse el cinturón en muchas cosas, pero creo que la tecnología va a ser uno de los ejes en los que nuestros clientes van a apostar y, desde nuestra humilde posición, vamos a ayudarles a que [esa ventaja] sea una realidad".