Nanomedicina ‘made in Spain’, a escala industrial

Investigación

Un nuevo material 'reconfigurable' con impresión 3D líquida

Es un material similar a un hilo de agua, desarrollado por el laboratorio de Berkeley, y podría utilizarse en dispositivos electrónicos y químicos

8 mayo, 2018 13:00

Un equipo de investigadores científicos del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley ha desarrollado una técnica de impresión 3D que puede fabricar piezas líquidas dentro de un material sólido... o no. 

En las pruebas ya se han impreso hilos de aguas de entre 10 micrómetros y 1 milímetros de diámetro, de varios metros de longitud y con diferentes formas, en espiral y en ramificación. De este modo, puede adaptarse a su entorno y cambiar de forma cuando sea preciso.

Es una nueva clase de material que puede reconfigurarse a sí mismo

Para conseguir este nuevo material se ha utilizado una impresora 3D muy específica y modificada ad hoc para este proyecto. Esta impresora deposita las “redes de agua” en una base líquida hecha de aceite de silicona que puede utilizarse para la síntesis química y la producción de la electrónica líquida.

Los investigadores imaginan que el resultado podría utilizarse para construir componentes electrónicos, dispositivos elásticos con una potencia más flexible gracias a su carácter líquido.  Asimismo, prevén sintonizar químicamente los tubos y las moléculas que fluyen a través de ellos parar generar bloques de construcción a nanoescala.

"Es una nueva clase de material que puede reconfigurarse a sí mismo y tiene el potencial de personalizarse en recipientes de reacción líquida para muchos usos, desde la síntesis química hasta el transporte iónico y la catálisis", subraya Tom Russell, científico visitante del departamento de Ciencias del Berkeley Lab's Materials.

Russel desarrolló con Joe Forth y otros científicos de este departamento este material. Forth fue el encargado de modificar y adaptar una impresora 3D, con el objetivo de remover los componentes diseñados para imprimir plástico. Estos se introducen en un jeringa, por cuya aguja se expulsará el líquido. Forth programó la impresora para insertar esta aguja en el sustrato de aceite de silicona e inyectar el agua en un patrón predeterminado.

“Podemos exprimir el líquido de la aguja y colocar hilos de agua donde queramos en tres dimensiones”, dijo Forth. Una de las características que destaca Forth de este nuevo material es que su estructura es “infinitamente reconfigurable” al poder romperse y cambiar la forma de los hilos de agua que se generan.