La logística y el transporte están viviendo un profundo cambio desde el inicio de la pandemia. Según Forbes Insights,  el 65% de los directivos del sector cree que se puede hablar casi de renacimiento de la industria logística. ¿Los culpables? La inteligencia artificial y el aprendizaje automático.

En este sector, la IA puede contribuir a optimizar las rutas de reparto, mejorar la eficiencia en el consumo de combustible y reducir los tiempos de entrega, señala el informe de McKinsey The promise and challenge of the age of artificial intelligence.

Y eso es precisamente lo que persigue la plataforma cloud con inteligencia artificial desarrollada por la startup catalana Hedyla.  A partir de dos soluciones, una destinada a las rutas de reparto y otra a los desplazamientos en el interior de almacén, el software de la compañía permite reducir hasta el 30% el tiempo invertido en ejecutarlas y el 90% destinado a su planificación.

El software de Hedyla, fundada en 2019, incorpora algoritmos de IA para procesar la información digitalizada de la que ya dispone una empresa, como las rutas, el tiempo de operación habituales o el funcionamiento del almacén. Con estos datos, “el sistema aplica machine learning para la planificación de rutas y su adaptación automática en tiempo real a circunstancias que puedan afectarlas como por ejemplo el tráfico, los horarios de los clientes o las capacidades de los vehículos”, explican desde la empresa. En todo momento, la empresa usuaria dispone de un panel de control para conocer la localización de cada conductor y realizar el seguimiento de las entregas, mientras que los repartidores a través de la app, saben en tiempo real la ruta asignada y los posibles cambios.

El software permite además gestionar la actividad de los almacenes y ofrece indicaciones de mejora a partir de aspectos como las distancias o el peso de las cargas. Además, analiza el histórico de la empresa para proponer automáticamente cambios que optimicen el sistema de distribución y almacenamiento de productos.

Entre sus clientes se encuentran cadenas de supermercados como DIA, empresas de bebidas como Mahou San Miguel o de alimentación como Campofrío. “No somos una herramienta dirigida a empresas que quieran empezar a digitalizar sus procesos, sino que nos dirigimos principalmente a grandes empresas que ya dispongan de sistemas digitales pero quieran dar un paso más allá y optimizar su funcionamiento”, señala Andreu Araque, uno de los fundadores de la startup.