
Adolfo Carretero./
El CGPJ abre una investigación sobre el trato del juez Carretero a Elisa Mouliaá tras 900 quejas que han colapsado el buzón
Las denuncias, ninguna suscrita por el abogado de la actriz, se centran en la "falta de empatía" y "agresividad" del instructor del 'caso Errejón' / La ley considera la desconsideración como falta grave o leve.
Más información: La ministra de Igualdad, contra el juez que interroga a la denunciante de Errejón: "Este tipo de preguntas revictimizan"
El Promotor de la Acción Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Ricardo Conde, ha acordado hoy abrir unas diligencias informativas para investigar el trato dado por el juez Adolfo Carretero a la actriz Elisa Mouliaá el pasado jueves.
Ese día Mouliaá compareció en el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid para ratificar la denuncia que interpuso contra el exportavoz de Sumar y exdiputado en el Congreso Íñigo Errejón por una presunta agresión sexual que habría ocurrido en el verano de 2021.
Fuentes del CGPJ han señalado que el buzón de quejas de la unidad de atención al ciudadano se ha colapsado tras recibir más de 900 denuncias -aún no han podido ser contabilizadas en su totalidad- contra Carretero.
Algunas de las denuncias tienen la misma redacción. En ellas se atribuye a Carretero una "falta de empatía" y de "sensibilidad" con quien comparecía en el Juzgado como presunta víctima, se critica su "agresividad" y trato "soez" y se considera que el instructor "revictimizó" a Mouliaá.
Entre los denunciantes no se encuentra el abogado de la actriz, Alfredo Arrién, que considera que, pese al trato del juez, su clienta ratificó su versión, lo que a su juicio le da aún más valor.
La Ley Orgánica del Poder Judicial tipifica el trato desconsiderado de un juez de dos maneras. Como falta grave, sanciona "el exceso o abuso de autoridad, o falta grave de consideración respecto de los ciudadanos". Y como falta leve tipifica "la desconsideración con los ciudadanos".
La ley sanciona con falta grave con multa de 501 a 6.000 euros y las faltas leves solo con advertencia o multa de hasta 500 euros o con ambas.
No obstante, las diligencias informativas son únicamente un primer paso. Consisten en una somera investigación tras la cual el Promotor debe decidir si archiva el asunto o abre expediente disciplinario.
Un precedente equiparable es el expediente disciplinario que el CGPJ abrió en 2016 a una juez de instrucción de Vitoria, que acabó siendo archivado por la Comisión Disciplinaria del órgano de gobierno de los jueces.
Durante un interrogatorio a una mujer denunciante de agresiones sexuales, la juez le preguntó "¿cerró bien las piernas? ¿cerró toda la parte de los órganos femeninos?".
El caso provocó la protesta de varios colectivos feministas, entre ellos de la Asociación Clara Campoamor, que fue el que divulgó lo sucedido.
Por seis votos a uno, la Comisión Disciplinaria concluyó, tras visionar el interrogatorio, que, con independencia del mayor o menor acierto en la formulación de la pregunta, la juez estaba tratando de indagar en los hechos y no podía considerarse que fue ofensiva ni desconsiderada.