En el sumario de la investigación a los CDR aparecen conversaciones de Quim Torra con líderes de estos grupos en los que alentaba y daba cobertura a protestas contra el Gobierno de España llegando a respaldar el corte de carreteras en los días previos a Semana Santa.

El sumario recoge varias conversaciones en las que el president de la Generalitat conversa con investigados no encarcelados de estos grupos. Sí hay otros acusados de integración en organización terrorista que han sido enviados a prisión. No hay constancia de que Torra conociera las acciones terroristas que iban a cometer, por lo que no está investigado.

Torra aseguró cobertura institucional a sus acciones de protesta que implicaban el colapso de infraestructuras en estas conversaciones grabadas por la Guardia Civil que maneja la Audiencia Nacional y de las que ha informado la Ser.

Precisamente los últimos días los choques entre manifestantes en movilizaciones promovidas por los CDR y agentes de los Mossos d'Esquadra han agudizado las discrepancias entre JxCat y ERC y han puesto en evidencia la diferente respuesta del presidente catalán, Quim Torra, y del conseller de Interior, Miquel Buch.

Son dos las brechas reabiertas en el seno del Govern a raíz de los enfrentamientos callejeros entre Mossos y manifestantes: por un lado está en discusión la actuación -"desproporcionada" para algunos sectores independentistas- de los agentes y, por otro, el distinto tono empleado para rechazar las acciones de violencia en la calle.

Tras los disturbios de la noche del martes, Torra se reunió a primera hora de la mañana en el Palau de la Generalitat con el conseller de Interior, Miquel Buch, el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, la consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, y la consellera de Justicia, Ester Capella.

Posteriormente, Torra se desplazó hasta Caldes de Malavella (Girona) para unirse a una de las marchas independentistas iniciadas esta mañana con el apoyo de la ANC y Òmnium Cultural, una decisión que, según las diversas fuentes, ha causado perplejidad no solo en ERC sino también en sectores de JxCat en el Govern, al constatar que el president se ausentaba del Palau de la Generalitat por unas horas en plena crisis, y con Buch en una situación cada vez más delicada por los disturbios en la calle.

Desde Sils (Girona), Torra realizó unas declaraciones en las que ha obvió los altercados y ha afirmado que su Govern está "al lado de la gente", si bien minutos después atendió de nuevo a los medios para incluir una breve referencia a los incidentes: "La violencia no nos representa ni nos representará nunca, al movimiento independentista catalán".

Ya por la noche, Torra hizo un llamamiento a "parar ahora mismo" los actos vandálicos para evitar que estos incidentes dañen al independentismo, a la vez que alertó sobre "grupos infiltrados" en estos disturbios.