Podemos e Izquierda Unida han anunciado su acuerdo para concurrir de forma conjunta a las elecciones autonómicas y municipales de la Comunidad de Madrid. Una alianza que pretende unir el voto de las izquierdas para conseguir más escaños y en la que, a priori, se esperaba la participación de Más Madrid. Pero no va a ser así.

Tal y como han conformado fuentes del grupo a nivel regional, Más Madrid sólo va a concurrir junto a Podemos e Izquierda Unida en algunos territorios muy puntuales tras haber analizado su situación particular. "Municipios concretos", insisten desde el grupo de Mónica García.

Por el momento, hay dos localidades en la que estas uniones sí van a ser una realidad: Rivas-Vaciamadrid y Tres Cantos. Y, según fuentes del partido, no habrá muchas más.

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En el caso de Tres Cantos, los tres partidos han llegado a un preacuerdo con Verdes Equo para capitalizar todo el voto a la izquierda del PSOE y concurrir juntos a las municipales. El acuerdo va a debatirse individualmente en cada formación y, posteriormente, refrendarse. Aunque todo parece indicar que saldrá adelante.

Todavía no se ha decidido cómo se hará la lista, ni cómo se encajarán las primarias, pero lo que está claro es que será una coalición de partidos y que todos tendrán representantes en los primeros puestos.

La estrategia de Más Madrid es que estas alianzas dependan de la idiosincrasia de cada territorio. Y eso, en el caso de Rivas, significa continuar con lo que funciona. Allí, Somos Rivas (integrada por la coalición de IU, Equo y Somos Rivas) y Rivas Puede (partido local vinculado a Podemos) están ya gobernando en la ciudad.

Pero fuera de eso, Más Madrid se desvincula de la coalición que ya han anunciado Podemos e Izquierda Unida en el Ayuntamiento y la capital y se prevé extender a la mayoría de los municipios.

Por el momento, los dos partidos repetirán y, como adelantó EL ESPAÑOL, concurrirán juntos al ayuntamiento y la Comunidad de Madrid con dos morados encabezando las listas. Alejandra Jacinto en la Comunidad y Roberto Sotomayor en el Ayuntamiento de la capital.

Colmenar y San Sebastián

A la espera de que el acuerdo sea ratificado por la militancia, se prevé que esta misma unión se repita en el resto de municipios de la Comunidad de Madrid, donde sus votos pueden ser imprescindibles para quitar la alcaldía a candidatos del Partido Popular.

Este es el camino que ya están siguiendo varias candidaturas conjuntas para las elecciones municipales de 2023, sobre todo en el norte de Madrid.

Por ejemplo, en Colmenar Viejo todo parece indicar que se va a repetir la estrategia de las anteriores elecciones. En San Sebastián de los Reyes, Podemos Sanse e Izquierda Unida están acercando posiciones para presentar una candidatura conjunta.

En 2015, cuando la Izquierda pretendía evitar que gobernara Cristina Cifuentes, las luchas de ego impidieron que la izquierda arrebatara la presidencia al Partido Popular.

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Izquierda Unida no consiguió obtener más de 30.000 votos, y esto hizo que se quedara fuera de la Asamblea. Cifuentes consiguió ser nombrada presidenta de la Comunidad.

Las cuentas que hicieron los partidos de izquierdas eran claras: si hubieran ido juntos (Podemos, IU y PSOE) habrían conseguido 66 escaños, uno más de los necesarios para la mayoría absoluta.

¿Con el PSOE?

Juan Lobato, al presentar su candidatura, ya lanzó esa oferta a los partidos a la izquierda del PSOE. Que se unieran para juntar el voto y fue rechazada. La verdad es que, ni uniéndose el PSOE, las cosas en la Comunidad de Madrid cambiaría mucho.

Analizando los resultados del 4-M, si PSOE, Más Madrid y Podemos se hubieran presentado a las elecciones en una candidatura conjunta, sólo habrían sacado un diputado más en la Asamblea de Madrid. 

Según un simulador de la Ley D'Hont que ofrece la Comunidad de Madrid, el resultado de esa alianza en 2021 habría sido prácticamente calcado al que obtuvieron presentándose por separado. De hecho, sólo habrían sumado un escaño más y habrían quedado lejos de arrebatarle la presidencia a Isabel Díaz Ayuso.

El simulacro reparte la atribución de escaños, teniendo en cuenta que, en las elecciones a la Asamblea de Madrid, sólo serán tenidas en cuenta las listas que obtienen, al menos, el 5% de los votos válidos emitidos, como establece el artículo 18.2 de la Ley Electoral de la Comunidad de Madrid.

Durante los comicios electorales del 4 de mayo, el PP consiguió el 45,2% de los votos, que se tradujo en 65 escaños. Más Madrid el 17,1%, por los que tiene 24. El PSOE registró el 16,9%, gracias a los cuales tiene 24 sillones en la Asamblea de Madrid; Vox el 9,2%, con 13 escaños y, por último, Podemos obtuvo el 7,3%, lo que se traduce en 10.

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Si las izquierdas se hubieran presentado unidas, PSOE, Más Madrid y Podemos hubieran sumado el 43,2% de los votos, lo que se traduciría en 59 escaños. Uno más de los que han conseguido prestándose por separado. Vox habría tenido 13 (se mantendría igual) y el PP de Ayuso habría perdido uno, quedando en 64.