Pedro Sánchez tiene las competencias para desconfinar Madrid debido al funcionamiento del estado de alarma, pero Partido Popular y Ciudadanos quieren brindarle "una propuesta irrechazable" para hacerlo a su manera. Tanto el Ayuntamiento capitalino como la Comunidad han diseñado un grupo de expertos que trabajará en ese sentido.
Según las fuentes municipales y autonómicas consultadas por este diario, portavoces de los distintos sectores económicos de la región han trasladado a los gobiernos municipal y autonómico la "extrema necesidad" de "tener preparada la reapertura". Estos ruegos se han incrementado sobremanera después de que la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, insinuara diciembre como fecha de desconfinamiento para bares y restaurantes.
"Si la orden de abrir llega en diciembre, Madrid no podrá abrir", destaca un importante miembro del gobierno de la capital en conversación con este diario. Tanto Partido Popular como Ciudadanos temen que Sánchez convierta la ciudad en la "Wuhan de Europa". Dicho de otra manera: les inquieta que el Ejecutivo central no desacordone esta zona "hasta el final", lo que abocaría a la "catástrofe" el tejido empresarial.
A nadie se le escapa a estas alturas la guerra soterrada de los gobiernos autonómicos y municipales de PP y Cs con Moncloa. Las "improvisaciones" y "continuas rectificaciones" de Sánchez y sus ministros a lo largo de los últimos días soliviantan al Ayuntamiento y la Comunidad. "Frente a eso... No nos queda más remedio que adelantarnos. Intentaremos que no tomen las decisiones más importantes referidas al desconfinamiento. Por eso les trasladaremos una propuesta irrechazable", desgrana esta vez un miembro del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso e Ignacio Aguado.
El Ejecutivo de Cibeles y el de la Puerta del Sol -compañeros de partido- coinciden en que España necesita una "desescalada asimétrica". Admitiendo esa premisa, no quieren quedarse "en fuera de juego". Con la "coartada epidemiológica" -desgranan los portavoces consultados- "Sánchez podría dejar Madrid para el final".
Conservadores y liberales conciben que si fabrican un plan antes de que Moncloa deba tomar decisiones, será difícil que Sánchez la desdeñe en su totalidad de cara a la opinión pública. "Nuestro planteamiento tendrá muchísima fuerza", pronostican.
"No podemos resistir más"
"Antes, la decisión del confinamiento era la más difícil de tomar. Ahora, mantenerlo es lo más fácil. Debemos ser audaces y combinar el respeto de los preceptos sanitarios con la reactivación de la actividad económica", desliza un importante miembro de Ciudadanos.
El grupo de la Comunidad de Madrid es de "carácter transversal", aunque todas las decisiones pasarán por la consejería de Sanidad antes de llegar a Moncloa, precisamente para testar que se ajustan a lo ordenado por las autoridades médicas.
"Somos conscientes de las dificultades. Esa asimetría también debe afectarnos a nosotros. El plan de desconfinamiento no puede ser el mismo para la sierra que para la ciudad de Madrid", apunta esta fuente.
"Tenemos una preocupación que todavía no ha saltado a los medios, pero es la mayor de las complejidades. Cualquier medida de apertura, por ejemplo una referida al sector de la hostelería, generaría un cuello de botella. ¿Con quién dejan a sus hijos esas personas que se reincorporan a sus puestos de trabajo? No pueden llevarlos al colegio ni dejarlos con los abuelos. Es dramático", asumen desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
Medidas para la ciudad de Madrid
"Madrid es comercio y hostelería", informa otro dirigente del Ejecutivo municipal. En ese sentido, el alcalde, José Luis Martínez-Almeida; y la vicealcaldesa, Begoña Villacís, han dejado entrever algunas de las posibles medidas que incluirá su propuesta. Por ejemplo, ampliar las terrazas, tanto en metros como en concesiones.
En el comité de expertos de la ciudad, habrá dos ingenieros de Silicon Valley, urbanistas y arquitectos, una socióloga, epidemiólogos y el famoso veterinario Juan José Badiola -al frente de la enfermedad de las vacas locas-. Todos ellos colaborarán sin percibir remuneración alguna.
El Consistorio encargó recientemente un informe al Centro de Predicción Económica (Ceprede) y al Colegio de Economistas. La conclusión: el paro aumentará un 5,4% este año tras dos meses de confinamiento. El coronavirus afectará, según estas páginas, a 60.500 empleos directos, 108.000 contando los puestos sometidos a ERTE que se tornarán irrecuperables.