Puigdemont pide retirar las monedas de 1 euro con la cara de Juan Carlos y Bruselas lo descarta

En su argumentación de motivos, el que fue presidente de la Generalitat de Cataluña entre 2016 y 2017 recuerda que, en el mes de noviembre, el fiscal del Tribunal Supremo español anunció la tercera investigación al Emérito por sus supuestas actividades de blanqueo de dinero. Estos hechos son, a juicio de Puigdemont, suficientes para eliminar la cara del Rey de las monedas.

"De conformidad con el Reglamento (UE) n.º 729/2014 del Consejo, deben evitarse los diseños 'inadecuados' de las caras nacionales de las monedas de euro, y los Estados miembros pueden formular objeciones antes de la aprobación de los diseños", expone el eurodiputado reclamando que la efigie del Emérito se retire.

De hecho, el parlamentario (al que recientemente le han retirado la inmunidad diplomática y podría ser juzgado por el 1-O) aboga por evitar la emisión de monedas acuñadas con efigies de personalidades vivas. Una propuesta que también ha rechazado la Eurocámara por una cuestión de competencias.

Ahora bien, es cierto que los Estados miembros de la zona del euro pueden plantear objeciones a los bocetos de las caras nacionales de las monedas antes de ser acuñadas. El Consejo debe dar su aprobación definitiva (artículo 10 del Reglamento n.º 729/2014) tras escuchar a Estados miembros, pero no a parlamentarios concretos como es el caso de los actuales solicitantes: Toni Comín, Carles Puigdemont y Clara Ponsatí.

"Habitual" en las monarquías

Así las cosas, si un Estado miembro presentara una objeción, Europa podría plantearse estudiar la reclamación, pero no si proviene de un europarlamentario concreto o un grupo. "Estas monedas circulan en toda la zona del euro y no sólo en el Estado miembro emisor", recuerda la Eurocámara.

En estos momentos, ningún Estado miembro ha planteado objeciones a las monedas en euro emitidas por España "ya que en las monarquías europeas es habitual que la cara nacional represente al jefe del Estado".

Hay que recordar que desde la abdicación del rey Juan Carlos I en 2014, su retrato ha sido sustituido por el del rey Felipe VI. Es decir, las monedas con el rostro del Emérito se considerarán "desactualizadas" cuando estén deterioradas con el paso de los años y se retirarán de su circulación en su ciclo natural.