Signus ha recogió 215.000 toneladas de neumáticos, en 2024.

Signus ha recogió 215.000 toneladas de neumáticos, en 2024.

Historias

Suelo antigolpes en parques infantiles o césped artificial: así ruedan los neumáticos hacia su segunda vida

Signus, una entidad sin ánimo de lucro creada por las grandes marcas, se encarga de su recogida, gestión y reutilización.

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En España hay alrededor de 33 millones de coches. Pues ese número habría que multiplicarlo como mínimo por cuatro, porque un coche no usa solo un juego de ruedas, para hacerse una idea de la cantidad de neumáticos que hay en España. El material principal de las cubiertas es el caucho, y es uno de los principales responsables de la mala calidad del aire

Por eso, los principales fabricantes, empujados por la normativa, pusieron en marcha Signus, una entidad sin ánimo de lucro, para que las empresas adheridas, proveedores y distribuidores, tengan la garantía de que todo el caucho que introducen en el mercado se tratará de forma correcta al final de su vida útil. En 2023, último año del que se tienen datos, recogieron 215.000 toneladas

María Paz Robina, presidenta de la entidad y directora general de Michelín, escribió en la Memoria Anual: "Hemos realizado una gestión eficiente gracias al compromiso de toda la cadena de valor que gracias a su trabajo e implicación ha contribuido a mejorar la eficiencia y reducir la huella de carbono de nuestra actividad".

El caucho reciclado de los neumáticos tiene muchas aplicaciones. Una de las más destacadas es su uso en la construcción de carreteras, donde se incorpora polvo de caucho en mezclas asfálticas para mejorar la elasticidad y durabilidad del pavimento.

Además, están desarrollando un proyecto para la fabricación de pavimento que absorba el sonido del tráfico. Este material también se usa en circuitos de carreras en los laterales para absorber golpes y ruido. 

Los neumáticos se que se usan en el circuito de Monteblanco, Huelva.

Los neumáticos se que se usan en el circuito de Monteblanco, Huelva. Signus

Pero el destino más agradecido por los padres es el material que se utiliza en los parques infantiles. Ese suelo acolchado que evita que los niños se golpeen fuerte al caer está hecho con los neumáticos reutilizados. También se usa en los suelos de seguridad en centros deportivos para minimizar las lesiones.

Del taller al parque

El proceso de reciclaje empieza con la recolección del material, las cubiertas de ruedas. De todo tipo y de todos los tamaños, desde motos, coches o tractores. Los distribuidores, talleres o fabricantes asociados a Signus declaran el volumen de caucho que introducen en el mercado y la entidad se encarga de su recogida

Una vez acumulados los llevan a las plantas donde les aplican un proceso mecánico de reciclaje y los separan en caucho, metal y textil. Cada material tendrá un uso determinado. Las cubiertas son transportadas a plantas de tratamiento donde se someten a diferentes etapas.

Empiezan por la descontaminación y el desmontaje para separar el acero y la fibra textil del caucho. Luego pasan a la trituración para facilitar su manejo y procesamiento, y pulverización de donde se obtienen materiales adaptados a distintas aplicaciones industriales.

En la actualidad se trabaja para mejorar estas plantas, con el objetivo de generar nuevos procesos de pirolisis que permitan obtener nuevos productos como aceite de caucho o el negro de carbono con el que crear otros neumáticos, cerrando así el círculo económico.

Los científicos trabajan en nuevas técnicas de mejorar el reciclaje.

Los científicos trabajan en nuevas técnicas de mejorar el reciclaje. Signus

El trabajo de Signus no solo reduce la cantidad de residuos en los vertederos, donde hasta hace poco acababa la mayoría de ruedas usadas, sino que contribuye al ahorro de recursos naturales y energía. De hecho, se estima que el reciclaje de neumáticos en España ha permitido ahorrar 1.117.408 toneladas de CO₂.

El reciclaje de neumáticos es un ejemplo de economía circular, donde residuos potencialmente contaminantes se transforman en recursos valiosos para diversas industrias. ¿Pero quien paga la fiesta? Aunque Signus ha reducido el coste de gestión, se supone que todos ellos los sufraga en primera instancia la industria. De hecho, por eso se conoce como SCRAP (sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor). Y finalmente repercute en la factura que paga el consumidor

El objetivo que persiguen las entidades recolectoras es conseguir darle un valor a este producto y generar un mercado que se mantenga por sí solo. Esto contribuirá además del beneficio económico para los conductores, tendrá un resultado significativo en el medioambiente.