El estadio municipal de Chozas de Canales, donde se produjo la agresión.

El estadio municipal de Chozas de Canales, donde se produjo la agresión.

Toledo

Nuevo episodio violento en el fútbol base de Castilla-La Mancha: el padre de un jugador expulsado agrede al árbitro

El colegiado, que acabó en el hospital, fue golpeado en la cara al acabar un partido de juveniles disputado el viernes en Chozas de Canales (Toledo).

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El fútbol base de Castilla-La Mancha ha vuelto a vivir un lamentable episodio de violencia, de nuevo con un árbitro como víctima. Fue el pasado viernes 14 de febrero cuando, al acabar un partido de categoría juvenil disputado en el estadio municipal de la localidad toledana de Chozas de Canales, el padre de un jugador que había sido expulsado momentos antes propinó presuntamente un fuerte golpe en la cara al colegiado C.G.M. Unos hechos que la víctima, de 22 años de edad, ya ha denunciado ante la Guardia Civil.

A consecuencia de la agresión sufrida, el árbitro fue atendido en la noche del mismo viernes en el Hospital Tres Culturas de Toledo. Según ha podido confirmar EL ESPAÑOL -EL DIGITAL CLM, el informe médico certificó contusiones en el lado izquierdo de la cara, tanto en la mandíbula como en la oreja y el oído, aunque sin perforación del tímpano, además de una contractura muscular cérvico-dorsal.

Unas lesiones que por suerte no revisten gravedad, pero por las que el joven colegiado deberá guardar reposo durante 72 horas. Asimismo, le fueron prescritos analgésicos tanto orales como tópicos contra el dolor.

Jugadores de entre 16 y 18 años

La agresión se produjo al finalizar el partido de juveniles -futbolistas en formación de entre 16 y 18 años- que enfrentó al equipo local, el Ayuntamiento de Chozas de Canales, contra el C.D. Cedillo del Condado B. Un encuentro correspondiente a la 17ª jornada del grupo VIII de la categoría Juvenil Territorial que acabó con victoria visitante por 0-1.

Según el acta del partido, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL - EL DIGITAL CLM, durante el encuentro un aficionado local profirió insultos y amenazas reiteradas contra el colegiado, entre ellas frases como: "Hijo de puta", "qué malo que eres", "maricón", "puto mierdas", "a la salida te parto las piernas" o "cuando acabe el partido le voy a meter dos hostias".

Tras el pitido final, prosigue el relato arbitral, se produjo una invasión de campo en la que jugadores, cuerpos técnicos y el propio colegiado quedaron rodeados por decenas de personas. Durante el tumulto, una mujer que había entrado en el terreno de juego comenzó a increpar al árbitro y, tras un intercambio de palabras, le golpeó en el brazo antes de marcharse.

Más amenazas

Posteriormente, aunque el entrenador local intentó acompañar al árbitro al vestuario para calmar los ánimos y evitar males mayores, un jugador que había sido previamente expulsado, también integrante del Ayuntamiento Chozas de Canales, presuntalmente amenazó a C.G.M. con frases como "te espero a la salida" y "aquí no puedo hacer nada, pero fuera soy libre de hacer lo que me dé la gana".

Poco después, antes de alcanzar el vestuario, el colegiado fue agredido por la espalda mientras escuchaba el grito de "maricón, hijo de puta". Al girarse para identificar al agresor, recibió un fuerte golpe en la mandíbula y el oído izquierdo que le dejó aturdido y mareado, hasta el punto de caer.

Mientras se encontraba en el suelo, recibió asistencia de los técnicos de ambos clubes, que se preocuparon por su estado y lo trasladaron a la caseta.

Intervención de la Guardia Civil

La Guardia Civil llegó minutos despés al estadio municipal de Chozas de Canales tras ser alertada del incidente. Una vez allí tomó declaración al colegiado y a varios testigos, por lo que los agentes pudieron identificar al presunto agresor, que resultó ser el padre del jugador expulsado.

Posteriormente, una ambulancia se personó en el lugar y los sanitarios realizaron una primera evaluación médica al árbitro. "Después de una hora de la finalización del partido, puedo lograr salir del terreno acompañado de la Guardia Civil y ayudado de mis acompañantes hasta mi coche para que estos me trasladasen al hospital", recoge C.G.M. en el acta.

El árbitro ya ha presentado la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil por la agresión sufrida, que se suma a un triste historial de violencia que salpica de forma más habitual de lo deseable al fútbol modesto de Castilla-La Mancha y de toda España.