La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F), en encuesta anónima realizada en su página web, con fecha 15 de abril, ha afirmado que el 87 por ciento de los participantes ha confesado que la dotación de equipos de protección individual (EPI) e hidrogel en sus centros de trabajo en la región es "insuficiente o nula", además de que el 70 por ciento se ven obligados a reutilizar los pocos EPI existentes.

En una nota de prensa, CSI-F ha denunciado que los centros de trabajo, tanto en la Administración pública como en la empresa privada, "no cumplen con los criterios técnicos, higiénicos ni de suministro de materiales de protección necesarios para proteger a los trabajadores en activo".

En este sentido, ha subrayado que Castilla-La Mancha todavía tiene "mucho que hacer" para garantizar la seguridad de los empleados y cumplir con las medidas de prevención establecidas por el Ministerio de Sanidad, justo el día en el que Guadalajara y Cuenca entran en la fase 1 de desescalada, mientras que Ciudad Real, Toledo y Albacete permanecen en la fase 0.

La organización sindical ha detallado que el 55 % de los participantes señala que todavía no se han aplicado medidas para garantizar la distancia de seguridad en sus lugares del trabajo, tales como una nueva disposición de 1,5 metros de separación o la colocación de mamparas, a lo que se suma que un 35,6 % considera que la limpieza y desinfección son "cuestionables".

Carencias apreciables

"A nivel técnico, las carencias también son apreciables", ha remarcado CSI-F, sobre todo en lo referente a la formación laboral impartida para hacer frente al coronavirus, donde el 66 % de los encuestados indica que la información obtenida es "poco práctica e insuficiente".

En cuanto al teletrabajo, si bien la mayoría de las empresas con esta opción lo han aplicado, también existe un 35,5 % que advierte de que no se le ha facilitado. Entre los participantes en la encuesta, las respuestas de los profesionales del ámbito sanitario, público y privado, se mantienen en la misma línea que las del resto de trabajadores sondeados.

Concretamente, el 97 % responde que la cantidad de materiales de protección suministrados son "insuficientes", mientras que solo al 9,4 % se le ha realizado el test de la COVID-19.

Con estos resultados, la Central Sindical ha insistido en que la mayoría de los centros de trabajo de Castilla-La Mancha "no cumplen con los requisitos de prevención y seguridad establecidos por el Ministerio de Sanidad", en conformidad con la Ley 31/1995 de prevención de Riesgos Laborales y el Real Decreto 664/1997 sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición de agentes biológicos durante la actividad laboral.

Exigen soluciones

Por ello, ha apremiado a las administraciones y empresas de la región a suministrar los materiales de protección necesarios, garantizar las condiciones de distanciamiento y desinfección adecuadas, y formar debidamente a sus trabajadores para enfrentar el virus. "Así, y sólo así, se podrá preparar a Castilla-La Mancha para afrontar adecuadamente la desescalada", ha concluido.